Choque de titanes

El invicto campeón estadounidense Floyd Mayweather Jr. cuenta las horas para ganar, a sus 35 años, 32 millones de dólares a costa del puertorriqueño Miguel Cotto, que tiene asegurados ocho millones.

Sin subir aún al cuadrilátero en la velada programada en Las Vegas (Nevada), las apuestas ya tienen un veredicto en proporción de 6-1: absoluto favoritismo a Mayweather Jr.

Después de 42 victorias, 26 de ellas antes del límite, Mayweather Jr. es consciente de que no va a encontrar otro botín millonario después de la pelea de hoy contra el campeón del peso mediano junior de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), que propinó 30 nocauts en 37 combates de los que solo perdió dos.

“El único plan es ganar. No ser más rápido ni defensivo o agresivo, sino ganar y ser el más inteligente”, explicó.

“Escuchar a mi esquina. Escuchar a mi entrenador, cualquier plan que mi entrenador tenga, eso tendremos que hacer”, añadió.

En la otra esquina, Cotto mantiene su personalidad introvertida, de pocas palabras y el mensaje repetido de que está mejor preparado que nunca.

“Confío en todo lo que he hecho. Estoy feliz de volver a pelear y no me preocupo para nada de mi rival”, puntualizó.

Pesaje.
El primero en subir a la romana fue el junior, el cual pesó 151 libras, tres por abajo del límite, y lo más que ha dado en su carrera, contra Óscar De La Hoya marcó 150 libras.

Cotto no se quedó atrás, se despojó de la ropa y detuvo la balanza en 154 libras, los cientos de boricuas estallaron, su gladiador está listo para la guerra.

Mayweather Jr. y Cotto se encararon, hicieron el clásico cara a cara, el estadounidense mascaba chicle, el puertorriqueño estaba serio, sus rostros estaban a punto de chocar.

Pleito coestelar.
El mexicano Saúl Álvarez sin problemas ni contratiempos marcó 154 libras, el límite de la división, mientras que el norteamericano Shane Mosley detuvo la báscula en 154.5 libras, media libra arriba de la categoría, mas tuvo media hora para bajarla y regresó pesando las 154 libras pactadas.