United y US Airways cancelan proceso de fusión

Las aerolíneas United Airlines y US Airways anunciaron que cancelaron su fusión después que el Departamento de Justicia amenazó con presentar una demanda para detener la adquisición, de acuerdo con declaraciones de las aerolíneas.
Esta decisión era esperada luego que el Departamento de Justicia anunció más temprano su decisión de bloquear este proyecto estimando que una fusión de este tipo reduciría la competencia en el transporte aéreo en Estados Unidos en detrimento del público, transgrediendo así la legislación antimonopolio.
La UAL Corp, empresa matriz de United Airlines, acordó pagar los $50 millones por cancelación de compra contemplado en el acuerdo de fusión.
El Departamento de Justicia señaló que la adquisición propuesta, que hubiera sido la más grande en el sector de las aerolíneas, hubiera reducido la competencia, aumentado los precios y hubiera afectado a los consumidores.
"La UAL Corporation pretende trabajar con US Airways para decidir las medidas apropiadas que se requieren asumir ahora que la US Airways ha reconocido que la fusión con United no seguirá adelante’’, señaló la United en un comunicado.
UAL también explicó que "continuará concentrando sus esfuerzos para restaurar su rentabilidad y ofrecer a sus clientes el mejor servicio posible así como para concluir con sus distintas categorías de asalariados las negociaciones en curso en vista de un nuevo acuerdo colectivo’’.
Por su parte, funcionarios de US Airways dijeron que estaban desilusionados porque fue cancelada la fusión.
"Nosotros, sin embargo, debemos respetar la decisión del Departamento de Justicia’’, indicó la US Airways en un comunicado.
United, la segunda empresa aérea más grande del mundo, trató de cancelar el convenio a principios de julio.
United sintió que no iba a alcanzar la aprobación de los reguladores y que tendría enormes obstáculos económicos y laborales que superar antes de que pudiera alcanzar la fusión, que propuso el año pasado.
Las familias que se van de vacaciones, las corporaciones y el gobierno federal, que gastan millones de dólares en viajes aéreos, pagarían el precio si se autorizara que la fusión siguiera adelante, indicaron empleados gubernamentales.
"Mientras algunas fusiones fortalecen la competencia, este no es el caso. Si esta adquisición recibiera autorización para continuar, millones de consumidores(...) no tendrían otra alternativa sino pagar tarifas más altas y aceptar servicios aéreos de menor calidad’’, dijo el secretario de Justicia, John Ashcroft.