Sharon arma a isralíes vecinos de zonas palestinas
Publicado 2002/11/13 00:00:00
- MelquÃades Vásquez
Avi Ohayon, llora sobre la tumba cubierta de flores, de sus hijos Matan, de cinco años y Noan de cuatro. Los niños y su madre, ex exposa de Avi, resultaron muertos en su residencia el fin de semana cuando un miliciano palestino los asesinó en el kibutz Metzer.
El primer ministro israelí, Ariel Sharon, ha ordenado al Ejército que distribuya 1,600 fusiles de asalto en los pueblos israelíes cercanos a los territorios palestinos de Cisjordania, tras el ataque contra el kibutz Metzer (granja colectiva) en el que murieron tres adultos y dos niños israelíes.
Sharon pidió al Ejército que aligere los procedimientos burocráticos necesarios para distribuir las armas a los pueblos y aldeas israelíes a lo largo de la línea de separación de Cisjordania.
En tanto, el Ejército israelí destruyó la noche del lunes a ayer, la vivienda del comanditario del atentado que la víspera costó la vida a cinco civiles israelíes.
Una madre y sus dos hijos de cuatro y cinco años, que fueron asesinados a sangre fría por un miliciano palestino en su casa del "kibutz" Metzer, fueron enterrados ayer, en el cementerio de Izur Shalom en la aldea Kiryat Bialik entre muestras de extremo dolor.
Bajo un cielo plomizo y lluvia intermitente, los cuerpos de Revital Ohayon, de 34 años y sus hijos varones, Matan, de cinco y Noan, de cuatro años, fueron sepultados, acompañados de una mil personas emocionadas, aunque serenas, que depositaron flores en sus tumbas.
Al entierro asistieron además del padre de los niños, Avi Ohayon, 34 años, y numerosos familiares y amigos, el político laborista Abraham Burg y el enviado especial de la UE a Oriente Medio, Miguel Angel Moratinos.
Hacia las 11 de la noche del pasado domingo, Revital Ohayoun, de 34 años, acababa de leer un cuento a sus hijos, los arropó y, al parecer, escuchó ruido en el exterior.
La mujer llamó inmediatamente por teléfono al que fuera su marido Avi Ohayoun, con el que mantenía buenas relaciones a pesar de estar divorciada desde hacía tres años.
En ese momento, un miliciano palestino de las Brigadas de Al-Aqsa, abrió la puerta de una patada de su casa del kibutz Metzer, situado al norte de la ciudad cisjordana de Tulkarem y en el que viven muchos latinoamericanos de origen judío y conocido por su carácter pacifista.
Revital saltó y trató de proteger con su cuerpo a sus hijos, pero el miliciano la abatió y después la emprendió a tiros contra los niños, bajo los edredones de sus camas y en su habitación infantil decorada con sus propios dibujos.
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores Benjamin Netanyahu prometió ayer que, si es elegido primer ministro, expulsará de los territorios palestinos a Yasser Arafat.
"La primera tarea del nuevo gobierno será expulsar a Arafat. Yo expulsaré a Arafat"", declaró Netanyahu en un discurso televisado en una reunión de su Partido Likud.
Sharon pidió al Ejército que aligere los procedimientos burocráticos necesarios para distribuir las armas a los pueblos y aldeas israelíes a lo largo de la línea de separación de Cisjordania.
En tanto, el Ejército israelí destruyó la noche del lunes a ayer, la vivienda del comanditario del atentado que la víspera costó la vida a cinco civiles israelíes.
Una madre y sus dos hijos de cuatro y cinco años, que fueron asesinados a sangre fría por un miliciano palestino en su casa del "kibutz" Metzer, fueron enterrados ayer, en el cementerio de Izur Shalom en la aldea Kiryat Bialik entre muestras de extremo dolor.
Bajo un cielo plomizo y lluvia intermitente, los cuerpos de Revital Ohayon, de 34 años y sus hijos varones, Matan, de cinco y Noan, de cuatro años, fueron sepultados, acompañados de una mil personas emocionadas, aunque serenas, que depositaron flores en sus tumbas.
Al entierro asistieron además del padre de los niños, Avi Ohayon, 34 años, y numerosos familiares y amigos, el político laborista Abraham Burg y el enviado especial de la UE a Oriente Medio, Miguel Angel Moratinos.
Hacia las 11 de la noche del pasado domingo, Revital Ohayoun, de 34 años, acababa de leer un cuento a sus hijos, los arropó y, al parecer, escuchó ruido en el exterior.
La mujer llamó inmediatamente por teléfono al que fuera su marido Avi Ohayoun, con el que mantenía buenas relaciones a pesar de estar divorciada desde hacía tres años.
En ese momento, un miliciano palestino de las Brigadas de Al-Aqsa, abrió la puerta de una patada de su casa del kibutz Metzer, situado al norte de la ciudad cisjordana de Tulkarem y en el que viven muchos latinoamericanos de origen judío y conocido por su carácter pacifista.
Revital saltó y trató de proteger con su cuerpo a sus hijos, pero el miliciano la abatió y después la emprendió a tiros contra los niños, bajo los edredones de sus camas y en su habitación infantil decorada con sus propios dibujos.
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores Benjamin Netanyahu prometió ayer que, si es elegido primer ministro, expulsará de los territorios palestinos a Yasser Arafat.
"La primera tarea del nuevo gobierno será expulsar a Arafat. Yo expulsaré a Arafat"", declaró Netanyahu en un discurso televisado en una reunión de su Partido Likud.
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.