"Ninguna como Gilda Cárdenas"

Miles de interioranos salieron ayer a las calles a rendirle homenaje a la cantante del conjunto de Los Plumas Negras, Gilda Cárdenas, cuyo cadáver fue trasladado en un féretro, en caravana, desde la ciudad de Panamá hasta Las Tablas.
Al paso de la caravana, por diversos pueblos, seguidores de la cantante lanzaban flores y aplaudían en honor a la artista de la música típica, quien murió el sábado en un accidente de tránsito.
En la ciudad de Aguadulce, la caravana pasó a las 4: 40 p.m. y desde tempranas horas cientos de personas esperaron en las orillas de la carretera Interamericana para despedir a Gilda.
En el jorón La Tablita, lugar donde varias veces cantó Gilda con Los Plumas Negras, cientos de simpatizantes le aplaudieron y lanzaron flores a la carroza que transportaba los restos de la artista.
En Azuero, al llegar la caravana, el recibimiento fue multitudinario, ya que el recorrido se hizo más lento por la cantidad de personas que se tomaron las calles para despedir a la cantalante.
En varios toldos de los pueblos ubicados a las orillas de la carretera, se le rindió homenaje a la artista con la pieza musical "Ninguna como yo", que ella interpretaba con el conjunto de Nenito Vargas.
A pesar de que la caravana llegó a Santa María, en Divisa, en horas de la tarde, ésta aún casi a la media noche no había llegado a la ciudad de Las Tablas.
En Divisa, Chitré, La Villa de Los Santos, Guararé y otras comunidades, cientos de personas prácticamente no dejaban pasar a la caravana porque muchos querían saludar la carroza donde iban los restos de Gilda.
El parque Belisario Porras de Las Tablas estaba lleno de seguidores de la intérprete.
Con flores, cantando salomas y aplausos los pobladores saludaban y rendían tributo a Gilda Cárdenas.
Los restos de la artista llegaron hasta la casa de velación de la ciudad de Las Tablas.
Allí permanecerán hasta las 9: 00 a.m. de hoy para ser trasladados hasta la Iglesia de Santa Librada en Las Tablas.
La misa de cuerpo presente se extenderá por unas dos horas, para luego partir a pie desde la iglesia hasta el cementerio Francisco González Roca, donde también reposan los restos de su madre Benilda Mendoza.
En el cementerio varios artistas y grupos de la música típica tienen programado un corto homenaje a la artista de 49 años.
Estas condiciones incentiva a los científicos a pensar que en los próximos 20 años será posible enviar una misión humana a Marte.
*Noticia original John Hopkins University"s Applied Laboratory Physics