Pastilla contra la "goma" aún no llega a Panamá

Con sólo un mes en el mercado, la pastilla RU-21, ha ganado la simpatía de los norteamericanos quienes gastaron unos 2 millones de dólares para obtener sus beneficios. La promesa del fabricante es que dos píldoras acaban con la resaca en media hora.
Tristemente, los "rumberos" panameños tendrán que seguir sufriendo los estragos del alcohol, porque aún no se venden en el país.
La agencia noticiosa EFE publicó que el medicamento, creado por un científico ruso durante la Guerra Fría, es comercializado por Spirit Sciences USA, una empresa californiana.
La píldora contiene vitamina C, hidratos de carbono y aminoácidos; estos ingredientes disminuyen la producción de acetaldehído, un químico nocivo que surge de la metabolización del alcohol. El acetaldehído se convierte en ácido acético, una sustancia que afecta negativamente el hígado.
A la par del éxito de la pastilla surgió la controversia. Pam McCracken, experta en narcóticos de la Universidad Estatal de Colorado manifestó que RU-21 le da a las personas una "falsa sensación de seguridad", y les puede hacer pensar que pueden tomar más gracias al medicamento. Los fabricantes han advertido que RU-21 actúa en los tomadores "moderados".
Aún si los tomadores criollos se organizan, piquetean frente a las farmacias y reunen miles firmas para que la píldora sea comercializada en Panamá, no obtendrían ningún resultado; es el laboratorio fabricante quien tiene la última palabra.
El licenciado Luis Abadía, gerente de ventas de Representaciones Arrocha, explicó que en Panamá hay un gran problema, el mercado es de casi tres millones de habitantes, y de esos, sólo el 50% tiene la capacidad económica para comprar en las farmacias.
Con un mercado tan pequeño, los laboratorios, si es que se deciden a traer aquí sus productos, tienden a subir el costo porque las ventas son menores a la de otros países con varios millones de compradores más.
Los Institutos Nacionales de Salud (INH) de Estados Unidos, calculan que las resacas le cuestan al país 185 mil millones de dólares anuales por ausencias y bajo rendimiento laboral.