Weeden y Montenegro se lian a puñetazos

ALWIN WEEDEN terminó ayer su labor como Contralor de la República y comenzó otro papel, el de boxeador, al protagonizar una verdadera pelea callejera con Enrique Montenegro, secretario del Frente Nacional Contra la Corrupción.
El escenario fue la planta baja del edificio de la Contraloría, que estaba a lleno completo por un público compuesto por funcionarios de esa dependencia, que protestaban contra Weeden en demanda de pagos retroactivos.
Weeden cerró los libros de contabilidad y bajó de su oficina. Su rostro era de enojo. Caminó con las manos dentro de los bolsillos hasta el grupo de manifestantes, entre los que se encontraba Montenegro.
Weeden decidió llegar hasta el frente de Montenegro, quien no desaprovechó sus aventajados brazos largos para conectar un derechazo en el rostro del contralor.
El golpe hizo trastabillar al hasta ayer jefe de las finanzas públicas, pero al recuperarse se lanzó contra "Chito", sin poder desquitarse las acciones del primer asalto.
Weeden intentó abalancarse nuevamente sobre Montenegro, pero fue sujetado por su seguridad.
Finalmente, ambas figuras públicas fueron separadas.
El resultado del encuentro: Weeden con el rostro ensangrentado, ya que Montenegro le rompió la nariz y la boca.
Según Montenegro, el enojo de cinco años de persecución lo hizo actuar de esa manera.
Indicó que le recetó a Weeden un "one-two", al referirse al tipo de golpe boxístico empleado en su contienda.
"Chito" Montenegro, con este pleito callejero, suma a dos las peleas que ha protagonizado, donde se le puede contar con una ganada y una perdida.
El año pasado, Montenegro se enfrentó al exlegislador Noriel Salerno en un restaurante de la localidad.
El ex contralor Weeden, descartó alguna acción legal por lo ocurrido y dijo que dejará que sea la opinión pública la que juzgue.