La antorcha olímpica

El diseño de la Antorcha Olímpica de Sydney 2000 se inspira en el edificio de la Opera de Sydney, las aguas azules del Océano Pacífico y la delicada curva del bumerang.
Refleja los valores claves de estos Juegos: el espíritu igualitario de Sydney y de Australia, el compromiso del atleta y del olimpismo y la inspiración de la innovación.
La antorcha fue diseñada por la empresa Blue Sky Design, de Sydney; la investigación y el desarrollo con relación a la llama y el combustible se llevó a cabo en Fuel and Combustion Technology Australia en colaboración con la Universidad de Adelaida (Australia) y la firma GA & L Harrington, también de Sydney, se encargó de la construcción.
Basados en la idea de unos Juegos que no dañaran al medio ambiente, los "Juegos ecológicos", el diseño y el sistema de combustión de la antorcha son ejemplos de tecnología punta.
La antorcha olímpica tiene que ser seguro, tener una llama brillante, no dañar al medio ambiente y ser capaz de resistir todas las inclemencias meteorológicas. Se mantendrá encendida en vientos de hasta 65 km por hora o en un chaparrón tropical. Está provista de un dispositivo de seguridad que hace que se apague después de 10 segundos si se deja en el suelo o si se volviera al revés.
El diseño está compuesto de tres capas, que simbolizan la tierra, el fuego y el agua. La capa interior, que contiene el sistema de combustión, es de acero inoxidable pulido; la capa mediana de aluminio anodizado contiene el cartucho de combustible y la capa exterior, que encierra las otras dos, es de aluminio con un revestimiento especial. El sistema de combustión interno está hecho de cobre, latón, aluminio y acero inoxidable.
La antorcha pesa un poco más de un kilo y mide 72 centímetros. El combustible es una mezcla de propano y butano que no daña al medio ambiente, emite menos carbón y proporciona más luz por combustible consumido. El cartucho de combustible, de baja presión, dura 20 minutos y los cartuchos gastados y el combustible no utilizados se reciclarán.
El encendido de la llama olímpica constituye un aviso a todos los atletas del mundo de que los Juegos están a punto de empezar. También representa un momento clave para los miles de personas involucradas en la organización de los Juegos.
El recorrido de la antorcha comenzó en Grecia el día 10 de mayo. La llama viajará por trece países de Oceanía y llegará a Australia el día 8 de junio. Recorrerá todo el territorio australiano, llevando El espíritu olímpico por todo el país, para llegar a Sydney el día 14 de septiembre por la tarde, un día antes de la inauguración de los Juegos Olímpicos el día 15.