"La respuesta de Perú a general Ortega es desproporcionada", dice el ministro Ortega

El ministro de Defensa chileno, Francisco Vidal, calificó hoy como "desproporcionada" la respuesta del comandante en jefe de la Fuerza Aérea peruana a las declaraciones de su similar chileno, general Ricardo Ortega.

Hace unos días, durante el anuncio de nuevas adquisiciones de aeronaves, el general Ortega explicó el carácter disuasivo de la compra y afirmó: "Todos los que nos están mirando saben que tenemos una capacidad de golpear fuerte".

Ante esa declaración, su par peruano, Carlos Samamé Quiñones, afirmó: "Como buen futbolista, pegamos dos veces más".

"Si me pegan uno, yo pego dos", señaló, al tiempo que calificó de "exabrupto" y "barbarie" las expresiones del general Ortega. "Es un acto de enemistad, no un acto de conciliación", recalcó.

En opinión del ministro de Defensa chileno, la respuesta de Samamé "es desproporcionada, porque no es un problema de un gol más o dos combos más".

En declaraciones a radio Bío-Bío, añadió: "Para mí, como ministro de Defensa, no es tolerable que se trate a un comandante en jefe de la Fuerza Aérea de Chile como un bárbaro (..) Creo que no corresponde un trato (de este tipo) a un comandante en jefe de la Fuerza Aérea de Chile por parte de su par de nuestro país vecino".

"Además que en materia de barbaridades, me parece mucho más tremendo eso de hace años, de que los chilenos volverían en saco", remató Vidal en alusión a las polémicas declaraciones del general Edwin Donayre.

"He dado la consigna (de) que chileno que entra ya no sale, y si sale saldrá en cajón (ataúd). Si no hay suficientes cajones, saldrán en bolsas de plástico", fueron parte de sus polémicas palabras del 25 de noviembre de 2008.

En cuanto a las declaraciones emitidas el martes pasado por el general Ortega, Vidal consideró que fueron "la fórmula más fácil de explicar la disuasión".

"Hay formas de decirlo más o menos diplomáticas, pero eso no da para que sea tratado de bárbaro", enfatizó el ministro durante la despedida al cuarto avión chileno que partió esta tarde con ayuda para las víctimas de Haití.