Wall Street aparca la indecisión y cae ante el desánimo por la cumbre europea

Wall Street dejó hoy de lado la indecisión y cautela de las dos últimas jornadas para entrar de lleno en terreno negativo después de que el Banco Central Europeo rechazara la compra masiva de deuda soberana y se diluyesen las esperanzas sobre el resultado de la cumbre de Bruselas.

El Dow Jones de Industriales, el principal indicador del parqué neoyorquino, dio carpetazo a los moderados avances de las tres últimas jornadas y cerró la sesión con un marcado descenso del 1,63 % ó 198,67 puntos que le arrebató la simbólica cota de los 12.000 puntos al quedar en 11.997,7 unidades.

También llevaba tres días de ligeros ascensos el selectivo S&P 500, pero en esta sesión fue el más damnificado por el decidido ánimo vendedor de la jornada y perdió el 2,11 %, mientras que la caída fue del 1,99 % en el caso del índice compuesto del mercado Nasdaq.

El parqué neoyorquino, que el lunes comenzó esta crucial semana para el futuro del euro con grandes expectativas, sustituyó ese ánimo por un tenso compás de espera en las últimas dos jornadas que finalmente se transformó este jueves en un marcado pesimismo con la llegada de las primeras decisiones procedentes del Viejo Continente.

Si bien Mario Draghi, el presidente del Banco Central Europeo (BCE), anunció como estaba previsto una rebaja de 25 puntos básicos de los tipos de interés en la zona euro, hasta el 1 %, y el préstamo de liquidez sin límite a los bancos europeos durante tres años, la intervención del italiano quedó lejos de las expectativas que se habían creado en los mercados sobre esa comparecencia.

En Wall Street las esperanzas de que el nuevo presidente de la autoridad monetaria europea decidiera realizar una compra masiva de deuda soberana de los países con problemas de la zona euro a cambio de un acuerdo fiscal en la cumbre de Bruselas se vieron truncadas y sus tres principales indicadores despertaron ya en números rojos.

La tendencia se fue incrementando a medida que continuaban llegando noticias desde el BCE, ya que rebajó sus previsiones de crecimiento económico de la zona euro para 2012 hasta contemplar la posibilidad de una contracción, ya que pronostica un rango de crecimiento de la eurozona de entre el -0,4 y el 1 %.

Las palabras de Draghi también tuvieron una influencia decisiva sobre el cierre marcadamente bajista de las bolsas europeas, donde Milán perdió el 4,29 %, París el 2,53 % y Madrid el 2,12 %, entre otras.

El ánimo vendedor de la jornada no hizo más que intensificarse a medida que se fue acercando el cierre de la sesión, cuando comenzaron a llegar las primeras noticias sobre la cena informal de los líderes de la Unión Europea y en la que se discutió sobre el borrador del acuerdo, que contempla dos fondos de rescate en paralelo.

En concreto, se está negociando adelantar un año la entrada en vigor del fondo de rescate permanente, que tendría una capacidad de préstamo de un "máximo" de 500.000 millones de euros, mientras que se mantendría el fondo temporal (de 440.000 millones) hasta 2013.

Por si no fuera poco y entre la avalancha de noticias procedentes del Viejo Continente, esta jornada se conoció que la banca europea tiene una necesidad de recapitalización de 114.685 millones de euros, un 8 % más que lo pronosticado en octubre, según la Autoridad Bancaria Europea.

Como es ya habitual, la banca estadounidense se vio duramente golpeada por las noticias procedentes del Viejo Continente y se dejó en su conjunto un fuerte 3,23 %, arrastrada en gran medida por la caída del 8,42 % de Morgan Stanley y del 6,97 % de Citigroup, así como las de JPMorgan Chase (-5,24 %), Bank of America (-5,04 %), Goldman Sachs (-4,96 %) o Wells Fargo (-3,18 %).

Todo ello se producía mientras Jon Corzine, exgobernador del estado de Nueva Jersey y exconsejero delegado de MF Global, comparecía ante el Congreso estadounidense para explicar la quiebra de esa firma, que se vio obligada a declararse en suspensión de pagos por su exposición a la deuda europea, así como por la desaparición de cientos de millones de dólares tras ella.