Chaplin: una vida de película

Estar a su lado es como echar atrás la película pasando por Lumiere, Buñuel, Warner Bros., Coppola, Orson Welles, hasta el cine digital, sin perderse una escena. Una fuente de esparcimiento para cualquier país, sin distingo de idiomas o territorios. Historias y más historias sobre su padre y el cine relató Geraldine Chaplin durante el II Festival Internacional de Cine en Panamá. Geraldine es hija de Charles Chaplin y su última esposa, Oona O’Neill; nació en Estados Unidos en 1944.

La experiencia de poder estar al lado de esta estrella es única. Lo más cerca que uno se puede sentir de uno de los íconos y hombres más reconocidos del celuloide. Chaplin fue la encargada de abrir el festival y los organizadores le sugirieron que escogiera una de las cientos de películas que hizo su padre para presentarla en la muestra. Ella escogió "The Kid", un filme que trata sobre un bebé que queda en el abandono y un padre que, a pesar de la pobreza, busca todas las formas para criarlo y mantenerlo a su lado.

"Con esta película me identifiqué totalmente a esta edad con un niño, quería tener un padre así, no me daba cuenta de que era mi padre y tampoco me daba cuenta de que mi padre había inventado un padre así porque él también quería tener un padre así, un padre protector, un padre ideal", dijo Geraldine.

Es una película en la que existe un poco la maldad, pero lo más importante es que en esta película Chaplin mostró al mundo, y a sus colegas principalmente, que era posible unir en una misma cinta el drama y la comedia. “The Kid” nace en 1921 a raíz del fallecimiento de un hijo de Chaplin. El cineasta quedó muy afectado por la muerte de su hijo, hecho que lo inspiró a crear una película en la que se incluyeran bebés o niños, explicó su hija Geraldine. El rodaje de esta película duró aproximadamente un año y medio, la cinta tenía una longitud aproximada de 5,200 pies, lo que quiere decir que cada escena se filmó 53 veces, destacó Geraldine.

El filme posteriormente fue parte del conflicto del divorcio de Chaplin, pues su exesposa la quería como parte de la separación. Así que una noche, como a las tres de la madrugada, Chaplin tomó varias latas de café y empacó en ellas su filme, salió de casa y logró unir las cintas para deleitar al mundo entero a través de los años con estas escenas.

Esta es la historia detrás de la película que abrió el Festival Internacional de Cine. ¡Felicidades a sus organizadores!