Puente del mundo...
Durante el mes de noviembre, el país se viste de rojo, blanco y azul para celebrar las fiestas patrias. Conmemoramos los días en los que ...
Durante el mes de noviembre, el país se viste de rojo, blanco y azul para celebrar las fiestas patrias. Conmemoramos los días en los que ...
- Roberto Ogg Fábrega ([email protected]> )
- /
- - Publicado: 17/11/2015 - 12:00 am
Durante el mes de noviembre, el país se viste de rojo, blanco y azul para celebrar las fiestas patrias. Conmemoramos los días en los que nuestros próceres combatieron insaciablemente, a fin de liberar a nuestro país, y producto de estas gestas es el nacimiento de la República "independiente" y "democrática" que somos hoy.
Al revisar nuestra historia patria, desde los movimientos separatistas hasta las gestas de siembra de banderas y del 9 de Enero de 1964, es notoria una diferencia entre los jóvenes panameños de esa época versus los actuales. Es difícil ignorar que las gestas antes mencionadas respondían a un contexto histórico diferente: la opresión de fuerzas extranjeras, la invasión de un Estado en el territorio nacional? ¿Necesitamos esto para sentir esa efervescencia por nuestro patriotismo?, no debe suscitarse algo radical para ser patriotas. No debiese existir una diferencia entre los gestores del 9 de Enero que arriesgaron la vida por ver ondear la Bandera nacional, a luces largas, por la soberanía de todo un país y los jóvenes actuales. ¿Qué diferencias existen?
Me es difícil comprender a muchos de mis compañeros de clase cuando se acogen de cualquier tátara- abuelo para atribuirse otra nacionalidad, cuando desprecian a su Patria por el mal acto de un gobernante o cuando peor aún, hacen comentarios que denotan el desconocimiento de gran parte de la historia de nuestro país. Dentro de las cortas palabras que manifestó el señor Manuel Antonio Noriega, fue interesante cuando sentenció: "Hemos vuelto a la época del oscurantismo" (esta es la única idea que apoyo del exlíder).
Los jóvenes estamos prestando atención a trivialidades e ignorando no solo el acontecer nacional, sino nuestra historia, que fue la que nos llevó a ser el país que somos, para bien o para mal. Es necesario que seamos partícipes desde ahora, que nos involucremos en el acontecer nacional, que ejercitemos el exquisito derecho a la libre expresión del que no contaron nuestros padres o antecesores, manifestando nuestras opiniones y posiciones sobre el tema que nos apasione, respetemos otras culturas o tradiciones; sin embargo, no celebremos fiestas con fines turbios o insignificantes en nuestro territorio, dejemos de venerar culturas foráneas y conservemos nuestras costumbres cual flor del espíritu santo, pura e impoluta, pero a la vez, comprendiendo que vivimos en un país de tránsito y de servicio.
No solo deseando haber nacido en otros países deshonramos la Patria, sino también, las malas prácticas y costumbres. El juegavivo, los antivalores y hasta el quedarse callados ante un mal acto es darle un golpe bajo a nuestra Patria. Por tanto, los jóvenes también debemos ser fiscalizadores, deplorando las malas prácticas de principio y así cortaremos poco a poco con el ciclo o el por el que nos han mal catalogado; por otro lado, teniendo presentes que ser ciudadano no es solamente gozar con el derecho al voto, también adquirimos una serie de responsabilidades, algunas consagradas en normas y otras por simple humanidad. Esta debe ser la generación que estará a la vanguardia moral del país, ¿será esto posible? Pudiese sonar algo utópico, sin embargo, con cosas pequeñas hacemos patria.
Apreciemos el esfuerzo de nuestros próceres de la Patria, que lucharon con el anhelo de ver un país libre, donde los derechos de cada panameño se hagan valer. Hemos visto con el pasar de los años que nuestro país ha tenido altas y bajas, pero siempre ha sabido levantarse cual ave fénix, gracias a nuestro espíritu trabajador, nuestras insaciables ganas de servir y demás buenas costumbres que caracterizan a los istmeños. ¡Panameño, siéntete orgulloso del país en que naciste!
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.