¿Sistema único de Salud o Expropiación?
- José González Rivera
- /
- Cirujano Sub Especialista
- /
El acceso a la salud es un derecho fundamental de todos los ciudadanos, sin discriminar su origen. Y ese derecho de los ciudadanos tiene que estar garantizado por una obligación financiera del Estado Panameño, el cual debe planificarse de acuerdo al crecimiento socio demográfico y los problemas de salud prevalentes con énfasis en prevención en salud.
Un sistema único de salud sería legalizar el mayor atraco que han recibido las cuotas obreras patronales en los últimos años con el beneplácito de la junta directiva: la caja de compensación. Las pacientes del sistema público pueden usar cualquier beneficio de los asegurados y el Estado panameño desembolsará hasta 4 millones de dólares. Es decir, pueden consumir 100 millones de dólares, pero el MINSA pagará hasta 4 millones. Y eso que no se cuenta que el programa de enfermedad y maternidad no cobra adecuadamente los insumos utilizados por los no beneficiarios. Una colecistectomía laparoscópica no cuesta 300 dólares si en insumos se van más de 1000 dólares.
En contravía las entidades del Ministerio de Salud le cobran al detal y a precios exorbitantes a los pacientes asegurados y beneficiarios por la atención en sus instalaciones que suman muchos millones de dólares a pesar de que el trabajador formal también paga impuestos. La consulta oncológica de los pacientes asegurados se la cobraban a 100 dólares al programa de maternidad y enfermedad a pesar de que estos pacientes también pagan impuestos.
Es decir, el costo de la salud en Panamá en los últimos lustros se ha financiado con la socialización de las enfermedades de alto costo con el uso de la cuota obrero patronal de los demonizados funcionarios públicos.
En los países donde más se ha avanzado en la cobertura universal de los servicios de salud, el grueso del financiamiento se da a partir de impuestos generales. Universalidad no significa expropiar lo que se ha construido con las cuotas obligatorias.
Si la mitad de los gastos de las instituciones del Ministerio de Salud y patronatos se financian con el dinero privado de las contribuciones de empleadores-trabajadores y se debe asegurar la cobertura universal por medio de recursos fiscales, no habrá que pasar de 5% a 9% del PIB sino de 2,5% a 9% del PIB, disminuyendo así sea de forma gradual la aportación de las "cuotas obreros patronales" que financian el gasto en salud de la Caja, es decir, el esfuerzo será de tal magnitud que no solo habrá que duplicar, "sino cuadruplicar", el gasto gubernamental en salud.
Un sistema unificado de salud no disminuiría costos, haría crecer la informalidad, ya que los trabajadores preferirían dejar de pagar cuotas obrero-patronal para poder al fin adquirir la canasta básica de alimentos y el gobierno tendría que aumentar la cobertura de salud que se deja de financiar con la cuota obrero-patronal con una reforma fiscal que no dinamizará la maltrecha economía panameña.
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.