¿Somos tan increíbles?
- Santiago Fascetto
En el escrito se destacaba la diferencia entre el actual desarrollo de Panamá y la situación de Costa Rica. Y los ticos, en esa comparación, salían mal parados.
"¿Recuerdan aquella publicidad, de alguna marca de vehículos o de electrónicos, que decía: 'estos increíbles japoneses'? El anuncio destacaba la idea de que los japoneses eran capaces de hacer cualquier cosa, por difícil que esta fuera. Lo que fueron hace años los japoneses, dignos de sorprendernos por sus capacidades en el campo de la tecnología, lo son hoy los panameños", comienza el escrito.
Para los ticos, el progreso de Panamá y el desarrollo en infraestructura resulta “increíble”: ampliación del Canal, nuevas vías, cinta costera, ampliación de la terminal aérea, crecimiento de la Zona Libre de Colón y la construcción del Metro.
Según el articulista, incluso, el aumento y desarrollo del turismo en Panamá amenaza el liderazgo histórico de su propio país: "No es por supuesto desconocido el avance que han logrado en el turismo internacional que amenaza con desplazarnos", dice en el escrito.
Además, en esas líneas se destaca "el número de unidades habitacionales que miles de extranjeros adquieren anualmente en la Ciudad de Panamá y el interior de la República como segundas viviendas y que dinamizan el sector de la construcción creando miles de fuentes de trabajo y millones en ingresos".
A pesar del halago tico (solo un signo de que vamos por buen camino), aún hay mucho por hacer.
Sí, es verdad que Panamá avanza mejor y más firme que cualquier otro país de la región, como también es verdad que la pobreza, desigualdad, medio ambiente e inclusión son deudas pendientes.
Ningún político -ni ningún Presidente- puede atribuirse el actual desarrollo de Panamá. Es, en todo caso, una construcción colectiva que costó años de Democracia y esfuerzo.
Pero lo cierto, por otro lado, es que la mayoría de los panameños eligió a los gobernantes que, a pesar de lo cuestionable (y hay mucho) llevaron a este país a la actual situación.
Aún falta. Y mucho. Pero el camino es el correcto, a pesar de que a veces, nosotros mismos nos empeñamos por resaltar lo negativo, lo que no sirve, lo que está mal.
Es que para nosotros, a veces, no somos los increíbles panameños.
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.