Semana Santa
¡Viernes Santo! ¿Por qué murió Jesús?
Viernes Santo, no es un día más, es un momento para la renovación de la vida, renovación de nuestras conciencias, renovación de nuestros compromisos y con la virtudes del reino de los cielos.
Semana Santa
Viernes Santo, no es un día más, es un momento para la renovación de la vida, renovación de nuestras conciencias, renovación de nuestros compromisos y con la virtudes del reino de los cielos.
Jesús se ofreció en sacrificio vivo y santo por cada ser humano que existió y existe actualmente para consagrarse a Dios. Foto: EFE.
“Y aquél que es la Palabra estaba en el mundo; y, aunque Dios hizo el mundo por medio de él, los que son del mundo no lo reconocieron. Vino a su propio mundo, pero los suyos no lo recibieron.
Pero a quienes lo recibieron y creyeron en él, les concedió el privilegio de llegar a ser hijos de Dios.
Y son hijos de Dios, no por la naturaleza ni los deseos humanos, sino porque Dios los ha engendrado” (Juan 1:10-13).
Todo se desarrolla ese jueves, después de la última cena de Jesús con sus discípulos y amigos, en un lugar que él, había elegido para tan especial encuentro.
Encuentro caracterizado por compartir con sus allegados la esperanza del reino de los cielos y la traición de uno de sus mejores amigos “Judas el traidor”.
“Jesús asumió esta cena en el contexto de la cena pascual judía, donde el pan ázimo de la pascua que celebraban con sus apóstoles hacía referencia a esa noche en Egipto en que no había tiempo para que la levadura hiciera su proceso en la masa” (Ex 12,8).
VEA TAMBIÉN: Legisladores del futuro
Esta situación había ido demasiado lejos para Judas y otros discípulos, sus esperanzas políticas e intereses personales se veían desvanecerse, todos los enemigos de Jesús se habían puesto de acuerdo y organizado con el discípulo Judas para arrestarlo esa noche en el campo del Getsemaní y llevarlo a juicio por hereje, por traidor a los intereses del pueblo judío y el de roma.
El signo que se utilizaría sería el beso, el beso de la traición, el beso de la muerte.
Su amigo de confianza, el que le manejaba los fondos, le traicionaba junto a otros esa noche por unas monedas de oro, pero eso no sería obstáculo para cumplir con la voluntad de su Padre.
Jesús asume voluntariamente, las consecuencias de sus acciones, y no huye, no evade el arresto, al contrario, le da la cara asumiendo los cargos injustamente.
“Vino a su propio mundo, pero los suyos no lo recibieron”.
VEA TAMBIÉN: Utilicemos bien el tiempo
Asumió su martirio con el valor de un hombre de Dios, un hombre convencido de su misión, de sus principios y valores del reino de los cielos y sufrió hasta el extremo de morir crucificado.
El método más horrendo que ser humano haya podido crear para torturar y matar a otro ser humano.
Ese viernes al mediodía, después de las multiplés torturas, falleció Jesús en un lugar llamado de la Calavera (Gólgota), junto a dos antisociales de esa época crucificado…
Encima de su cabeza había un letrero que decía «Jesús de Nazaret, Rey de los judíos», escrito en hebreo, latín y griego… escrito por el mismo Poncio Pilato, procurador de Roma.
Triste historia esta.
Pero alguna vez te has preguntado ¿Por qué murió Jesús?, ¿Por qué tomó esa decisión Jesús, que le causaría tanto sufrimiento y la muerte?...
Jesús sabía que ya todo se había cumplido, y para que se cumpliera la Escritura dijo: Todo está cumplido.
Luego inclinó la cabeza, murió y entregó su espíritu.
Tenemos que señalar que esa última cena de ese Jueves Santo, celebrada por Jesús con sus discípulos y amigos sobre la mesa de aquel Cenáculo, se convirtió misteriosamente en el anticipo de su Cuerpo y de su Sangre, ofrecidos voluntariamente por y para la humanidad en el "cáliz" de la cruz, y sobre el "altar" del mundo.
Jesús se ofreció en sacrificio vivo y santo por cada ser humano que existió y existe actualmente para consagrarse a Dios, y para que también todos los seres humanos y de todas las creaturas y creaciones existentes del universo seamos consagrados de igual forma por medio de su verdad.
La palabra de Dios es la verdad, no hay otra.
La verdad es una sola y es indivisible y esa palabra es Jesús.
En aquella víspera de su padecimiento, Jesús con su sacrificio, instituyó también el Sacramento de su Cuerpo y Sangre, concediéndonos, en su misericordia, que recibamos el mismo con gratitud y humildad como memorial de “Jesucristo nuestro Señor”, y en esos santos misterios nos da una prenda de la vida eterna.
A la pregunta ¿Por qué murió Jesús?, la respuesta es muy simple… murió por ti y por mí.
Para renovar toda la naturaleza humana y la creación entera.
Bendiciéndonos con un anticipo de la vida que les espera a aquellos que vivan de acuerdo a su palabra con libertad y alegría.
Viernes Santo, no es un día más, es un momento para la renovación de la vida, renovación de nuestras conciencias, renovación de nuestros compromisos y con la virtudes del reino de los cielos.
Estamos ahora, en momentos difíciles donde todos los días las noticias de miles de muertes por todas partes del mundo nos hacen reflexionar cuál frágil es la vida.
Pero Jesús, con su sacrificio, nos da esperanza que así como él resucitó después de tanta violencia en este mundo los que crean en él, resucitarán para la vida eterna.
Que el Dios de la esperanza les bendiga siempre y haga brillar su rostro sobre ustedes.
Amén.
Reverendo.
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.