Panamá
Panamá aspira a completar toda su Ruta Transístmica Colonial como Patrimonio Mundial
- Ciudad de Panamá / EFE / @panamaamerica
El Comité del Patrimonio Mundial se reunirá del 6 al 16 de julio en la sede de la Unesco, París, para actualizar su lista patrimonial.

Panamá aspira desde hace años a que se considere Patrimonio Mundial su Ruta Colonial Transístmica. EFE
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Panamá espera que su Ruta Colonial Transístmica entre en su totalidad en la lista de Patrimonio Mundial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), en la que ya están incluidas sus partes más importantes.
El Comité del Patrimonio Mundial se reunirá del 6 al 16 de julio en la sede de la Unesco, París, para actualizar su lista patrimonial y entre las candidaturas están la Ruta Colonial Transístmica de Panamá
Panamá aspira desde hace años a que se considere Patrimonio Mundial su Ruta Colonial Transístmica, un conjunto de construcciones históricas con más de 500 años de historia que unen al Pacífico con el Caribe panameño y ya algunas edificaciones forman parte del listado de la Unesco.
El Sitio Arqueológico de Panamá Viejo, el Distrito Histórico de Panamá y las Fortificaciones de la Costa Caribe de Panamá - Portobelo y San Lorenzo-, ya son Patrimonio de la Humanidad.
Faltarían por incluir de la ruta los caminos coloniales que los unen -el de Cruces y el Real-, para lo que es necesario que se amplíen los límites del Sitio Arqueológico de Panamá Viejo y del Distrito Histórico de Panamá, según la web de la Unesco.
La Ruta Transístmica Colonial de Panamá es uno de los dos intercambios terrestres clave entre los océanos Atlántico y Pacífico a través de Centroamérica, como parte del Camino Real Intercontinental, un sistema comercial desarrollado por España para sus dominios coloniales entre los siglos XVI y XIX.
Los caminos de Cruces y Real
Y en esa ruta eran claves los caminos de Cruces y Real para conectar el litoral Caribe con la Ciudad de Panamá (Pacífico).
Cruces unía la capital panameña (Pacífico) con San Lorenzo (Caribe), mientras que el Real desembocaba en Portobelo (Caribe). Ambos trayectos transitan por la parte más angosta del país centroamericano, cerca de lo que hoy en día es el Canal de Panamá.
Levantados por los españoles en pleno auge de la colonización, las dos rutas atraviesan Panamá por tierra y río a la vez que cuentan la historia socioeconómica de este país, dependiente de los servicios y considerado desde sus inicios como un área de tránsito.
Se consideran, además, los precedentes de las infraestructuras modernas de Panamá como el ferrocarril y el propio Canal, que unen Pacífico y Atlántico para el trasiego de mercancía, principalmente, como eje clave para impulsar la economía del país.
Con la inclusión de esos dos caminos se completaría la declaración como Patrimonio Mundial de toda la ruta que fue "parte crucial" de un sistema global que permitió el monopolio español y la conquista de las Américas.
Panamá Viejo y el Casco Histórico
Ya forman parte de la lista de la Unesco desde 1997 las ruinas de Panamá Viejo y el Casco Antiguo, situados en Ciudad de Panamá.
Panamá Viejo es un conjunto de monumentos restaurados, con el campanario de 30 metros de la Catedral de Nuestra Señora de la Asunción en el epicentro. Fue la primera ciudad levantada por los españoles en el Pacífico de América sobre 1519 y, según historiadores, fue un importante "hub" (centro) comercial entre el viejo y nuevo mundo. Hoy, convertida en un centro de interés turístico.
La ciudad, que llegó a tener una población de hasta 10.000 habitantes, fue atacada por el pirata inglés Henry Morgan en 1671. La magnitud de la ofensiva hizo que los españoles provocaran un gran incendio que acabó con la urbe, según los expertos.
Y la ciudad fue erigida nuevamente en 1673 en lo que hoy es el Distrito Histórico de Panamá, más conocido como el Casco Antiguo.
Las fortificaciones del Caribe
También son Patrimonio Mundial los fuertes de la costa caribeña de Portobelo y San Lorenzo, unas majestuosas edificaciones de la época colonial inscritas en 1980, pero que desde 2012 están en la Lista del Patrimonio Mundial en Peligro.
El castillo de San Lorenzo está situado en lo alto de un acantilado en la desembocadura del río Chagres, un punto fundamental de la ruta transístmica, y desde allí se protegía de los piratas el importante transporte de mercancías llegadas desde la costa del Pacífico.
Es conocido el ataque en 1596, en plena construcción del castillo, perpetrado por el pirata inglés Francis Drake y su capitán Thomas Baskerville, o el sufrido en 1671 por Joseph Bradley, capitán del pirata galés Henry Morgan, que tomó el fuerte y destruyó muchas de sus estructuras.
Mientras que el fuerte de Portobelo está en el pueblo homónimo, donde también hay otras edificaciones de la época colonial.
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