Exclusivo Web
¡TESTIMONIO! Atacado por el coronavirus, Jorge Espino soñó que su abuela lo rescató de la muerte
La vida de Jorge Espino dependió de un ventilador artificial durante 20 días, mientras estaba en un coma inducido debido al coronavirus.
- Aurelio Martínez/ [email protected]/ @AurelioMartine
- - Actualizado: 20/9/2020 - 08:41 am
Salvar la vida cuando eres ingresado a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de un hospital depende el 50% de la fe y el otro 50% de los médicos, dijo Jorge Espino, presidente de la Liga Provincial de Sóftbol de Veraguas.
En una entrevista con el Panamá América, Jorge Espino aseguró que vive de milagro, tras librar una dura batalla contra el nuevo coronavirus.
Jorge Espino estuvo 30 días en el Hospital Luis “Chicho” Fábrega, de la ciudad de Santiago. En este periodo de tiempo, su vida dependió de un ventilador artificial durante 20 días, mientras estaba en un coma inducido.
Durante esos días su tío y comentarista de béisbol, Eric Espino, hacia los reportes de su estado de salud y se aferraba a Dios, al igual que el resto de su familia y amigos, para que le diera una nueva oportunidad de vivir a “Jorgito”, como cariñosamente lo conocen sus allegados.
“Después que a uno lo entuban en el hospital, no se acuerda de nada, estas en un coma inducido, pero yo soñé varias veces y solo recuerdo un sueño en especial y fue que yo estaba dentro de una multitud y apareció mi abuela Yolanda Espino, parada en una especie de plataforma y me tendió la mano y me ayudó a subir y me dijo quédate aquí a mi lado”, relató.
Yolanda Espino, quien padece de alzheimer, es la madre de los expeloteros veragüenses Titolivio Espino, Eric Espino y Jorge Espino (su padre).
“Tuve sueños con otros familiares, pero no fueron claros, solo el de mi abuela, apenas desperté del coma inducido lo recordé. Es especial porque un padre de la iglesia lo relaciona con un túnel que pasamos cuando estamos en coma y un ser querido que ha muerto o está vivo, nos puede decir que no es tiempo de irte o vente conmigo”, comentó Jorge Espino, ya recuperado del coronavirus.
“Lo que hace muy especial ese sueño es que mi abuela fue quien me crio en el barrio Martín Sánchez, en La Chorrera, junto a dos primos. Para mí, ella es mi madre y siempre he tenido un cariño grande por ella, existe una conexión importante, porque fue mi guía y mi protectora en todo”, enfatizó.
VER TAMBIÉN: Ifarhu revela calendario de segundo pago de Beca Universal y Planilla Global
Jorge Espino está casi seguro que se contagió cuando iba al supermercado a comprar alimentos, porque siempre respetó la cuarentena en el confinamiento de su hogar.
“A finales de junio sentí como resfriado y después me hicieron la prueba y salí positivo, al igual que mi esposa y mi hijo; una semana más tarde me sentí más agitado y fui al doctor, donde me realizaron varios exámenes y me tomaron radiografías de los pulmones y no se veían muy bien y decidieron hospitalizarme”, expresó.
“Después me dijeron que tenían que entubarme, porque el coronavirus seguía avanzando y me compliqué, a tal punto, que los doctores del hospital me dijeron después que los dos primeros días entubados fueron muy complicados y temían que no saliera vivo, pero fui mejorando, paulatinamente”, agregó.
El dirigente veragüense explicó que jamás pensó que el proceso de entubación iba a demorar tanto.
VEA TAMBIÉN: IMA y Mida evalúan mecanismo para entrega de jamones de este año
“Después me contaron que tuvieron que subirme la dosis de anestesia, porque yo me movía demasiado e intentaba quitarme los tubos. Yo no me acuerdo absolutamente de nada”, afirmó.
Relata que un día despertó y le quitaron los tubos. Ese momento no lo recuerda.
“Los dos primeros días mis signos vitales estuvieron débiles y los doctores le dijeron a mi tío Eric Espino, quien era responsable de recibir las llamadas, que mi vida estaba en peligro, y que 50% dependía de la fe en Dios y el otro 50% del trabajo que realizaran los médicos en el hospital veragüense”, aseveró.
“Después del tercer día empecé a mejorar paulatinamente, hasta el día 20 que me desconectaron del ventilador mecánico y me pasaron a la sala de recuperación; y al recuperar mis sentidos le pregunté a las enfermeras dónde estaba y me explicaron parte de lo que enfrenté. Gracias a Dios y a los doctores, que hicieron un extraordinario trabajo, estoy vivo”, afirmó.
En esta lucha contra la COVID-19, “Jorgito” está muy agradecido con su tío, Eric Espino, porque tomó la batuta y fue el enlace con los médicos y la familia. Además, porque en sus redes sociales pedía plegarias por su salud y organizaba cadenas de oración a través de Zoom.
“Fueron momentos difíciles, de mucha angustia, desesperación y ansiedad; no sabíamos que hacer y se nos ocurrió la unión de la familia para orar, porque había alguien que podría salvar a ‘Jorgito’ y ese era nuestro Señor omnipotente, quien fue que hizo el milagro y lo regresó con los pulmones purificados”, comentó el comentarista de béisbol.
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.