Él crea un "Free Jazz Latin"" que caló
Publicado 2006/08/08 23:00:00
- REDACCION
El músico de 38 años con un estilo diferente y moderno salió de La Habana en 1992 para tocar en el Festival de Jazz de Cancún y allí se quedó.
Mientras estudiaba en una escuela de arte en su Cuba natal, el percusionista Francisco Mela jamás se imaginó que llegaría a la prestigiosa Universidad de Berkeley en Boston; mucho menos que lo haría como profesor.
El músico de 38 años, quien acaba de sacar su primer álbum, "Melao"", con un estilo que llama "Free Jazz Latin"", salió de La Habana en 1992 para tocar en el Festival de Jazz de Cancún y allí se quedó.
"Fue bien fácil salir de Cuba"", dijo recientemente en una visita a la sede de la AP en Nueva York, donde reside actualmente. ``Lo difícil fue mi desespero por salir"".
Durante su estadía en el balneario mexicano, donde pasó sus primeros cinco años en el exterior, conoció a algunos estudiantes de Berkeley que lo animaron a expandir sus horizontes.
"Me decían que tocaba tan bien como ellos, que debería aplicar a la universidad"", relató el percusionista. ``Pero estando en Cuba uno oye sobre escuelas como Berkeley y lo ve "so far away" (tan lejano), que no lo podía creer"".
Tras advertirles que no tenía dinero, uno le explicó que podía solicitar una beca y lo llevó a su casa para enseñarle cómo hacerlo a través de Internet, pero la fecha límite había pasado.
Sin embargo, Mela consiguió que le dieran la oportunidad de viajar a Boston a presentarse en persona para una audición, y allí mismo le dieron la beca, pero era parcial.
Al no contar con los recursos para pagar sus estudios, decidió "aprender en la calle lo que no podría aprender en la escuela"".
"Viví por un mes en casa del pianista panameño Danilo Pérez y se lo agradezco con el alma"", señaló. Pérez, quien confiaba en el talento del joven cubano, le recomendó que se mudara a Boston para que aprendiera a tocar el verdadero jazz, y lo recibió como a un hermano.
La nutricionista, Fanny De Cardoze señala que es difícil que las personas puedan estar sin comer arroz.
Dice que la gente, ante la crisis, está tomando la medida de consumir menos de la cantidad regular.
Sin embargo, a su juicio, la actual coyuntura ayudaría un poco porque este grano se consume demasiado.
"El per cápita de arroz en el panameño es de media libra por día, lo que representa una cantidad considerable, pero si se elimina un poco, habrá una ganancia para el estado nurticional de las personas", alegó De Cardoze.
Las personas deben consumir otro alimento que sustituya el arroz durante este periodo de escasez.
Recomendó por ejemplo, pastas, papas, yuca, ñame, plátano, maíz, que son productos que tienen el mismo valor nutricional que el arroz.
Aclaró que comer mucho arroz no es malo, sino que contribuye a la obesidad.
Marvin Arias: "Creo que tendremos que conseguir el arroz en el exterior. Lo que están haciendo muchos comerciantes es subirle el costo, sin embargo, uno debe comprarlo donde esté más barato".
Eduardo Salinas: "El arroz está faltando en los supermercados y eso es evidente. Últimamente observo que hay arroz, pero no es el de mejor calidad, ya que el de primera es el que más rápido se acaba".
Arlenis Meneses: "Estoy en Panamá, pero en Sabanitas de Colón donde vivo, a veces se acaba muy rápido. Los días de quincena es peor porque todos quieren llevar el producto y no alcanza".
Ismael Gutiérrez: "La supuesta carencia de arroz en los supermercados y comercios es una estrategia que está utilizando el Gobierno para aumentar de precio el producto".
Demóstenes García: "Si hay desabastecimiento no me he dado cuenta. Lo que si es cierto es que el arroz siempre lo consigue mi esposa, sin costo adicional. Hay clases como el Doña Olga y Pellín que se acaban más rápido".
Laura Rivera: "El arroz es realmente necesario en la comida del panameño, pero como se ven las cosas, vamos a tener que optar por alimentarnos con verduras. Siento que es un problema que se va acrecentando".
El músico de 38 años, quien acaba de sacar su primer álbum, "Melao"", con un estilo que llama "Free Jazz Latin"", salió de La Habana en 1992 para tocar en el Festival de Jazz de Cancún y allí se quedó.
"Fue bien fácil salir de Cuba"", dijo recientemente en una visita a la sede de la AP en Nueva York, donde reside actualmente. ``Lo difícil fue mi desespero por salir"".
Durante su estadía en el balneario mexicano, donde pasó sus primeros cinco años en el exterior, conoció a algunos estudiantes de Berkeley que lo animaron a expandir sus horizontes.
"Me decían que tocaba tan bien como ellos, que debería aplicar a la universidad"", relató el percusionista. ``Pero estando en Cuba uno oye sobre escuelas como Berkeley y lo ve "so far away" (tan lejano), que no lo podía creer"".
Tras advertirles que no tenía dinero, uno le explicó que podía solicitar una beca y lo llevó a su casa para enseñarle cómo hacerlo a través de Internet, pero la fecha límite había pasado.
Sin embargo, Mela consiguió que le dieran la oportunidad de viajar a Boston a presentarse en persona para una audición, y allí mismo le dieron la beca, pero era parcial.
Al no contar con los recursos para pagar sus estudios, decidió "aprender en la calle lo que no podría aprender en la escuela"".
"Viví por un mes en casa del pianista panameño Danilo Pérez y se lo agradezco con el alma"", señaló. Pérez, quien confiaba en el talento del joven cubano, le recomendó que se mudara a Boston para que aprendiera a tocar el verdadero jazz, y lo recibió como a un hermano.
La nutricionista, Fanny De Cardoze señala que es difícil que las personas puedan estar sin comer arroz.
Dice que la gente, ante la crisis, está tomando la medida de consumir menos de la cantidad regular.
Sin embargo, a su juicio, la actual coyuntura ayudaría un poco porque este grano se consume demasiado.
"El per cápita de arroz en el panameño es de media libra por día, lo que representa una cantidad considerable, pero si se elimina un poco, habrá una ganancia para el estado nurticional de las personas", alegó De Cardoze.
Las personas deben consumir otro alimento que sustituya el arroz durante este periodo de escasez.
Recomendó por ejemplo, pastas, papas, yuca, ñame, plátano, maíz, que son productos que tienen el mismo valor nutricional que el arroz.
Aclaró que comer mucho arroz no es malo, sino que contribuye a la obesidad.
Marvin Arias: "Creo que tendremos que conseguir el arroz en el exterior. Lo que están haciendo muchos comerciantes es subirle el costo, sin embargo, uno debe comprarlo donde esté más barato".
Eduardo Salinas: "El arroz está faltando en los supermercados y eso es evidente. Últimamente observo que hay arroz, pero no es el de mejor calidad, ya que el de primera es el que más rápido se acaba".
Arlenis Meneses: "Estoy en Panamá, pero en Sabanitas de Colón donde vivo, a veces se acaba muy rápido. Los días de quincena es peor porque todos quieren llevar el producto y no alcanza".
Ismael Gutiérrez: "La supuesta carencia de arroz en los supermercados y comercios es una estrategia que está utilizando el Gobierno para aumentar de precio el producto".
Demóstenes García: "Si hay desabastecimiento no me he dado cuenta. Lo que si es cierto es que el arroz siempre lo consigue mi esposa, sin costo adicional. Hay clases como el Doña Olga y Pellín que se acaban más rápido".
Laura Rivera: "El arroz es realmente necesario en la comida del panameño, pero como se ven las cosas, vamos a tener que optar por alimentarnos con verduras. Siento que es un problema que se va acrecentando".
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.