En contra de los bandoleros

A inicios de su vida, cuando era apenas una niña y luego en su paso por la adolescencia, Olga Tañón ni siquiera echaba chispas. No fue hasta los años 80, al ingresar en el grupo femenino de merengue "Las Nenas de Ringo y Josie" cuando empezó a nacer la "Mujer de fuego".

Ya para el año 1992, Olga lanza su primer disco como solista de nombre "Sola", el cual ganó disco de platino, pero el que realmente la dio conocer fue "La mujer de fuego" donde nació el que hasta hoy ha sido su apodo.

Desde entonces, Olga Tañón lo ha ganado todo. Es millonaria, tiene una voz privilegiada, es una madre hermosa y el mundo la adora. Su mansión está llena de premios como: Lo Nuestro, Billboards y Grammys. Es más, hoy volverá a recibir un reconocimiento en Los Premios Lo Nuestro en Miami.

La intérprete de "Muchacho malo", "Es mentiroso" y "Hoy vengo a confesarme" recibirá un premio por su trayectoria de dos décadas en la edición 20 de esos galardones de la música, en los que la cantante puertorriqueña está postulada además en tres categorías.

Tañón es la artista con más galardones en la historia de los Premios Lo Nuestro, con 19.

Después de muchos años de sacrificio, la merenguera sigue ahí, consolidando cada vez más una carrera musical que no para, ya que según ella, sólo terminará cuando muera.

Su gira mundial "Evolution Tour 2008", que iniciará el 29 de febrero junto a reconocidos artistas es testigo de ello. Olga no se conforma con ser una merenguera ahora también cantará reggaetón.

De todo en el amor

La vida privada de Olga Tañón siempre ha estado en la palestra pública. Hace años se separó del pelotero de las Grandes Ligas, Igor González, con quien tuvo una hija de nombre Gabriella. Según los rumores, éste primero fue pareja de la India, se dijo que a Olga, la India le dedicó el tema "Mi mayor venganza" y la verdad que así fue. Las recriminaciones entre la pareja han sido permanentes en los medios de comunicación. Aunque la puertorriqueña aseguró que nunca fue maltratada físicamente por su ex, sí recibió golpes psicológicos, los cuales denunció.

A raíz de este amargo episodio, Olga inició una cruzada para ayudar a aquellas mujeres que, como ella, han sido víctimas de sus parejas. Por ello se hizo portavoz de una de las campañas contra la violencia doméstica de la Oficina de la Procuradora de la Mujer en Puerto Rico. Además se ha unido a otros esfuerzos similares en México y Venezuela.

Pero todo estos rencores quedaron atrás, ahora es una mujer felizmente casada con el productor Billy Denizard. El año pasado nació el hijo de ambos, asegura que su vicio es su esposo y sus tres hijos. Pero uno de sus mayores retos es ayudar a su hija Gabriela, quien sufre de una rara enfermedad de la sangre conocida como "Síndrome de Sebastián".