Consejo. La madre debe amamantar a su hijo durante la primera hora después del parto.
La leche materna, sinónimo de salud
Darle pecho al bebé no solo une más a la madre y al hijo; también aumenta su escudo inmunológico.
también se debe tener en cuenta
- La madre debe tener una dieta balanceada.
- Si nota que algún alimento que come le da diarrea, evítelo.
- Mantenerse hidratada es muy importante.
- Aprenda a ordeñarse y a guardar la leche de forma higiénica.
- Descanse lo suficiente. Es necesario para mantenerse alerta, a toda hora, durante el cuidado de su bebé.
Razones de peso sobran para que las madres que aman a sus hijos se lo demuestren y elijan amamantarlos por lo menos los seis primeros meses de vida y si es posible los dos primeros años, como aconsejan la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización Panamericana de la Salud (OPS), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y todos los entendidos en la materia.
En el Mes Mundial de la lactancia materna, veamos algunos de los beneficios de esta práctica:
1.- La leche materna es rica en anticuerpos que aumentan el nivel de resistencia de los niños a las enfermedades. El calostro (rico en vitaminas, proteínas y sales minerales) ayuda a que el bebé expulse sus primeras heces y a la prevención de ictericia
2. Está comprobado que niños amamantados durante el primer año de vida tinen menos infecciones del sistema gastrointestinal, menor riesgo de otitis, eccemas, diabetes, asma, linfomas, infecciones del sistema urinario.
3.- La leche materna es gratis, está a la temperatura adecuada y el bebé puede tomar la cantidad exacta que necesita, mientras está acunado en los brazos de mamá lo que lo hace sentirse más seguro.
4.- Favorece el mejor desarrollo psicomotor, emocional y social del niño.
5.- Previene infecciones que, en el caso de alimentación con sucedáneos de la leche materna, podrían resultar del agua sin hervir o mal hervida o de un biberón mal lavado.
6.- Reduce la morbi-mortalidad infantil y las posibilidades de muerte súbita del lactante.
7. Aminora las hemorragias postparto, la anemia, la mortalidad materna y reduce el riesgo de cáncer en el seno o en los ovarios. Además, ayuda a la involución del útero a su posición antes del parto y a que la mujer recupere más rápido el peso previo al embarazo.
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