¿Cómo y para qué?
¿Cómo y para qué? Son exactamente las dos preguntas que debemos hacernos antes de retirarnos, antes de rendirnos, antes de intentar otra cosa, antes de ...
¿Cómo y para qué? Son exactamente las dos preguntas que debemos hacernos antes de retirarnos, antes de rendirnos, antes de intentar otra cosa, antes de terminar una relación, antes de renunciar a un trabajo, antes de cualquier cosa que en el futuro nos podamos arrepentir de haberlo hecho o por lo menos eso es lo que yo he aprendido a hacer en esta vida, gracias a buenas y no tan buenas decisiones que he tomado.
En el deporte: se entra al deporte por diferentes razones, porque tu mamá y tu papá querían que fueras un deportista, porque a ti te gusta el deporte, porque siendo un deportista es la única manera en la que te ves saliendo adelante, porque simplemente tienes las cualidades para ser un deportista etc., etc., etc., son infinitas las razones por las que uno escoge ser deportista, pero al escoger esa profesión también tienes que saber que vas a recibir muchos golpes emocionales que te van a "matar" todas esas ganas, todos esos sueños, todas esas metas, todas esas expectativas al sueño que tenías por el deporte, y entonces te preguntas ¿qué voy hacer? Es justo ahí donde te vas a preguntar ¿cómo y para qué?
¿Cómo llegué hasta aquí? Es lo que te debes preguntar cada vez que sientas abandonar después de una derrota o de una mala competencia, echar el casete hacia atrás un poco y recordar cómo fue que comenzaste y comparar hasta donde has llegado, recordar las noches y días interminables de preparación, las veces que tuviste que decir que no a tus amigos que te invitaban a salir, pero tú no podías porque estabas muy cansado de los entrenamientos, porque tenías que levantarte temprano para volver a darle al día siguiente o porque tenías que estudiar y entrenar a la vez, tienes que recordar las veces que estuviste a dieta para poder rendir mejor en cada entrenamiento y competencia, tienes que recordar todas esas personas y amistades que conseguiste gracias al deporte, y ¿cómo esto? Y ¿cómo lo otro? Son muchos de esos "cómo" los que te van hacer volver y darle valor a todo ese tiempo invertido, tiempo que no va a regresar si abandonas, si te rindes, si vas, ese tiempo simplemente queda en el olvido y la incógnita mental de por vida de y que hubiese sido de mí si hubiese seguido? ¿hubiese sido campeón, hubiese hecho historia, alguien hubiese seguido mi ejemplo? ¿hubiese sido ejemplo para los niños? Muchas cosas que pudieron pasar, pero no las vas a saber porque te rendiste.
¿Para qué? Son infinidades de "para qué" los que nos pueden hacer emprender un viaje en la vida, ya sea en el deporte, trabajo o relaciones amorosas, tenemos que estar concentrados en todo momento, no podemos dejar que las distracciones nos desenfoquen, estar dispuestos a mejorar y aprender algo nuevo en cada momento que se nos dé la oportunidad.
Claro está que nuestro cuerpo no va a rendir ni responder de la misma forma como lo hacía en la juventud, pero le podemos sacar mucho provecho antes de que llegue ese momento, vas a conocer la mayor cantidad de personas posibles, las vas a ayudar en lo más que puedas y esté a tu alcance (eso será como un karma créeme, esas personas no se van a olvidar, bueno! Algunas sí, pero la gran mayoría casi siempre se acuerda) y para cuando llegue el momento de decir adiós al deporte como competidor, y digo como competidor porque una persona que hizo deporte toda su vida jamás deja de practicarlo aunque diga que está retirado, pero cuando llega ese momento de dejar las competencias es cuando comienzan a salir todos esos "para qué" que tenías en mente al principio, comienzas a disfrutar de una buena casa, un buen carro, una buena familia, buenos amigos, por qué no, algunos viajes entre otros placeres de la vida que con mucho sacrificio y esfuerzo conseguiste a lo largo y ancho del camino.
Ahora que estás a punto de abandonar, te has dado cuenta de cómo llegaste hasta donde estás y para qué lo estás haciendo.