La soledad de Uribe
Publicado 2007/01/21 00:00:00
La soledad de Uribe
Por Hernando Salazar
BBC Mundo / Bogotá
~~~~~~~~~~~~~~~~
Con Hugo Chávez al mando en el nordeste y Rafael Correa en el suroeste, el gobierno de Álvaro Uribe, en Colombia, empieza a transitar un camino solitario, precedido de tensiones con sus dos vecinos más importantes.
Algunos observadores y medios de comunicación colombianos consideran que Uribe tendrá que enfrentar en los próximos años una "tenaza" de Venezuela y Ecuador.
Las tensiones de Uribe con Correa y Chávez se deben, sobre todo, a diferencias ideológicas y a posturas encontradas frente a temas como la seguridad, el narcotráfico, los tratados de libre comercio, la integración regional y las relaciones con Estados Unidos.
Mientras Chávez y Correa son de izquierda, Uribe es considerado de derecha por unos y de centro derecha por otros.
Mientras Chávez y Correa critican la firma de tratados de libre comercio con Estados Unidos, Uribe es un entusiasta defensor de los mismos.
Y mientras Chávez y Correa son críticos de Estados Unidos, Uribe es el principal aliado del presidente George W. Bush en Sudamérica.
Arlene Tickner, profesora de relaciones internacionales de la Universidad de los Andes, en Bogotá, le dice a la BBC que la relación de Colombia con Estados Unidos es "exclusiva y excluyente".
Y cuando la BBC le pregunta si considera que esa relación está dejando sola a Colombia en la región andina, Tickner responde: "Diría que sí".
"El hecho de que el gobierno de Uribe se haya aliado tan férreamente con el gobierno Bush, no sólo en temas que afectan a la región, sino en temas globales, ha significado una creciente marginación (de Colombia) respecto de otros países, no solo en la región andina, sino en Suramérica en general", añade Tickner.
Pero, ¿hay una alianza entre Venezuela y Ecuador en contra de Colombia? En diálogo con BBC Mundo, el columnista Rafael Nieto Loaiza, de la revista Semana y quien es considerado amigo del gobierno, cree que sí podría hablarse de tenaza.
Sin embargo, Nieto aclara: "Tanto para Chávez, como para Correa y el mismo Uribe es indispensable tener una relación que no pase por las razones político-ideológicas, sino por el sentido práctico. Creo que al final es eso lo que va a ocurrir".
Colombia le vende buena parte de su producción industrial a Venezuela y Ecuador, y mantiene muchos nexos comerciales con los dos países.
El año pasado, sin embargo, Brasil, cuyo presidente es un izquierdista más moderado que Chávez, se convirtió en el segundo principal proveedor externo de Venezuela y desplazó, por un estrecho margen, a Colombia.
Por esa razón, a Colombia no le conviene que sus diferencias con los vecinos interfieran en los negocios.
Las tensiones más recientes han sido con Ecuador y se debieron a la fumigación con glifosato, por parte de Colombia, de cultivos de coca en la frontera con ese país.
Tanto el presidente saliente de Ecuador, Alfredo Palacio, como el entrante, Correa, consideraron la medida como poco amistosa.
Después, Hugo Chávez tomó partido por Ecuador y se unió al coro de los opositores al uso del glifosato, que es apoyado decididamente por el gobierno de Estados Unidos en la lucha contra las drogas.
Antes, durante la campaña presidencial en Ecuador, Correa dijo que no considera a la guerrilla izquierdista de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) -que operan en la frontera con Colombia- como un grupo terrorista.
Derrotar a las FARC, que son consideradas un grupo terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea , es una de las principales obsesiones de Uribe desde que ocupó por primera vez la presidencia en 2002.
En diciembre de 2004, la captura de Rodrigo Granda en Venezuela, considerado el "canciller de las FARC", y su polémico traslado a Colombia, produjo un serio incidente diplomático entre Uribe y Chávez.
En ese contexto, muchos se preguntan cómo se manejarán las relaciones de Colombia con sus dos vecinos en los años que vienen.
La columnista María Jimena Duzán le dijo a BBC Mundo que a Uribe le gusta construir relaciones personales con los otros presidentes, pero advierte que esos nexos son "frágiles".
"Las relaciones entre Colombia y Venezuela no son malas, paradójicamente. Deberían serlo. Y no lo son, no porque tengamos una cancillería en el asunto, sino porque se han reducido las relaciones a una cuestión personalista entre el presidente Chávez y el presidente Uribe. Eso es peligrosísimo", opina Duzán.
Ella cree que esa misma fórmula es la que el presidente colombiano quiere aplicar con Ecuador, con cuyo presidente Uribe logró un acuerdo para supervisar conjuntamente las futuras fumigaciones de cultivos ilícitos.
Consciente de las tensiones con los vecinos, la ministra de Relaciones Exteriores de Colombia, María Consuelo Araújo, dijo esta semana que "hemos optado por una diplomacia pragmática".
Eso quiere decir, en sus palabras, que Colombia buscará proyectos conjuntos con Ecuador y Venezuela, y no se detendrá en "los temas ideológicos, que pueden generar preocupación, debate y polémica".
Y, mientras tanto, Uribe trata de afianzar sus relaciones con otros mandatarios regionales, como Alan García, en Perú; Michelle Bachelet, en Chile; y Felipe Calderón, en México.
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.