CSS pide a la UP graduar 5 mil enfermeras en 4 años

La Caja del Seguro Social pidió a la Facultad de Enfermería de la Universidad de Panamá graduar a unas cinco mil enfermeras en los próximos cuatro años, para cumplir con la demanda de la institución.

La decana de dicha facultad, Elba de Isaza, dijo que la Universidad está en capacidad de cumplir con este reto que va dirigido a solucionar uno de los grandes déficit que tiene la CSS en este momento.

Sin embargo, Isaza manifestó que el nombramiento de más enfermeras en el sector público debe ir acompañado del mejoramiento de las condiciones laborales, ya que en algunos casos las llamadas "ángeles blancos" prefieren emigrar al sector privado, donde reciben un salario inferior, pero con un mejor ambiente laboral.

Incluso hay enfermeras graduadas que prefieren dedicarse a otras actividades, añadió.

Dura labor.
El déficit de enfermeras en la CSS actualmente se estima en mil profesionales, lo que obliga a las que están laborando a atender cerca de 30 pacientes por turno.

Esta realidad contrasta con lo que plantean las normas internacionales de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que recomienda solo 5 o 6 pacientes por turno.

Itzel Hewitt, hasta hace poco presidenta encargada de la Asociación Nacional de Enfermeras (ANE), explicó que este déficit se agudiza con el cambio de turno, porque el número de enfermeras disminuye.

Los médicos son conscientes de la realidad de las enfermeras. Fernando Cebamanos, presidente de la Asociación de Médicos, Odontólogos y Afines de la Caja de Seguro Social, sostuvo que el trabajo que realizan las enfermeras es sumamente "duro, por la cantidad de pacientes que atienden".

Esto, a su juicio, disminuye la calidad del trabajo que realizan las enfermeras.

Según Cebamanos, no basta con incentivar a las enfermeras desde el punto de vista salarial, hay que mejorar las condiciones de trabajo, reduciendo la cantidad de pacientes y la duración de los turnos, para aumentar las horas de descanso.

"Muchas de nuestras enfermeras tienen que cubrir dos turnos consecutivos, quedándoles menos de 8 horas para descansar, lo que es demasiado agotador", sentenció.

Afirmó que lo ideal sería adecuar y clasificar los turnos, dependiendo si la condición del paciente es intensiva, semintensiva o sólo observación, con lo cual se evitaría el desgaste del personal.