Uribe elude entrar en polémica por el supuesto enriquecimiento de sus hijos
- Manila
El presidente de Colombia, Álvaro Uribe, evitó hoy entrar en la polémica desatada en el país por unas denuncias periodísticas sobre supuesto enriquecimiento de sus dos hijos, Jerónimo y Tomás, con la compraventa de unos predios rurales.
El problema "lo manejarán ellos", afirmó Uribe en una escueta declaración sobre el asunto que ofreció durante una entrevista con la cadena Caracol Radio, de Bogotá.
La alusión es la primera del gobernante a las denuncias que implican a sus hijos y que fueron divulgadas el domingo pasado por el periodista Daniel Coronell, director el informativo Noticias Uno, de la televisión pública, y columnista de la revista Semana.
Según Coronell, Jerónimo y Tomás Uribe obtuvieron en dos años un beneficio de 3.000 millones de pesos (más de 1,26 millones de dólares) con la negociación de 32 hectáreas de terreno a las afueras de Mosquera, localidad vecina a Bogotá.
El predio aumentó de valor por efecto de su declaración como zona franca por parte de funcionarios subalternos del jefe del Estado, advirtió el periodista, quien es un fuerte crítico del gobernante.
Coronell indicó que dicha decisión fue adoptada por la Comisión Intersectorial de Zonas Francas, de la que hacen parte los ministros de Comercio, Industria y Turismo, Luis Guillermo Plata, y de Hacienda, Óscar Iván Zuluaga, y el titular de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian), Néstor Díaz, entre otros cargos.
Ambos cargos desmintieron el lunes un supuesto tráfico de influencias en favor de Jerónimo y Tomás Uribe, quienes el mismo día rechazaron las afirmaciones del periodista, que consideraron imprecisas, tendenciosas y malintencionadas.
De manera previa, las autoridades locales de Mosquera cambiaron el uso del predio de rural a industrial, precisó la misma fuente periodística.
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