Napoli aprovechó el desplome del "bullpen" de los Cardenales

El receptor Mike Napoli no tuvo problemas de ser el octavo en el orden de bateo de los Vigilantes de Texas porque al final iba a ser el que por segundo partido consecutivo pegó el hit que puso a su equipo a sólo un triunfo de conseguir el primer título de la Serie Mundial.

La hazaña de Napoli se dio en la parte baja de la octava entrada del quinto partido del Clásico de Otoño, que los Vigilantes ganaron por 4-2 después de remontar un marcador adverso de 0-2.

Es cierto que Napoli puso su parte, pero de alguna manera fue porque el "bullpen" de los Cardenales, que tan buen trabajo hicieron en las series anteriores antes de llegar al Clásico de Otoño, volvió a sufrir otro "colapso" que puede costarles el título a su equipo.

Asignado para proteger un empate en la octava entrada, el relevista dominicano Octavio Dotel otorgó la noche del lunes un doblete y a partir de ese momento todo fue a peor para los Cardenales, porque necesitaron otros tres relevistas para acabar el episodio, pero con el daño hecho y ponerse abajo 3-2 en la serie.

Si Dotel no respondió, tampoco lo hizo Mark Rzepczynski, con dos corredores en circulación y sin outs, al permitir un sencillo dentro del cuadro que desvió con una pierna para llenar la casa.

El lanzador zurdo tampoco pudo impedir el doblete de Napoli, que dio un bote antes de chocar contra el muro entre el jardín derecho y el central y que produjo las dos carreras del triunfo.

El piloto de los Cardenales, Tony La Russa, se apoyó en Lance Lynn y Jason Motte para salir del apuro, pero era demasiado tarde. El daño estaba hecho, y su estrategia de utilizar a muchos relevistas no le está resultado contra los Vigilantes.

Si le funcionó en la recta final de la temporada regular para remontar 10,5 de desventaja que tenían con los Bravos de Atlanta, a los que les arrebató el comodín de la Liga Nacional para luego eliminar a los Filis de Filadelfia, el equipo que salía como gran favorito al título del Clásico de Otoño, y a los Cerveceros de Milwaukee.

Ahora, los relevistas de los Cardenales han permitido ocho carreras en las últimas 11 entradas. Motte perdió en el segundo partido, Mitchell Boggs recibió el cuadrangular de tres carreras de Napoli que rompió el empate del cuarto juego y Dotel cargó con la derrota del quinto de la serie.

Los Cardenales regresan a su campo del Busch Stadium, de San Luis, para el sexto partido con la necesidad de darle un giro a la situación para recuperar la eficacia del "bullpen", pues los Vigilantes no perdonan y menos con bates oportunos y productivos como el de Napoli.

El abridor zurdo mexicano Jaime García, de 25 años, tendrá ante sí la gran responsabilidad y oportunidad de conseguir su primer triunfo en una Serie Mundial, en un escenario, como el Busch Stadium, donde se encuentra muy a gusto y dominante.

Sólo el fallo de Motte en el segundo partido le impidió conseguir la victoria, pero su trabajo desde el montículo fue impecable y merecedor de la victoria.

García es consciente, que los partidos se ganan y se pierden en equipo, por eso quiere ser el primero que salga inspirado al montículo y con ello contagiar al resto de sus compañeros, especialmente al "bullpen", que regresa con dos derrotas frustrantes y baja la moral.

La Russa adelantó que el equipo sabe como hacer las cosas y ahora más que nunca su carácter de lucha incansable y permanente volverá a estar más presente que nunca.

Los Cardenales son conscientes que están a sólo una derrota de quedar cortos en su intento por conseguir el undécimo título de la Serie Mundial, pero el lunes no fue por falta de oportunidades, sino todo lo contrario, les sobraron.

El equipo de San Luis, en el "Rangers Ballpark", de Arlington (Texas), dejó a 12 corredores en circulación ante el pitcheo de los Vigilantes, bateando de 12-1 con hombres en posición de anotar.

Después de cinco choques de esta Serie Mundial, los Cardenales llevan de 43-8 (.186) con corredores en posición de anotar. Además, en el quinto juego se convirtieron en apenas el cuarto equipo en la historia de los 107 Clásicos de Otoño en embasar a 17 bateadores y anotar dos carreras o menos.

La Russa reconoció que tuvieron "muchas oportunidades" y lo único que tienen que hacer es trabajar para aprovecharlas en el sexto partido antes que sea demasiado tarde.