Muere Emmanuella Dampierre, abuela de Luis Alfonso de Borbón

Emmanuella Dampierre y Ruspoli, fallecida hoy a los 99 años de edad, fue esposa del infante Jaime de Borbón y Battenberg y madre de Alfonso de Borbón, quienes podrían haber accedido a la Corona española.
Emmanuella Dampierre nació en el palacio de Rúspoli en Roma (Italia) el 8 de noviembre de 1913, era hija del vizconde francés Roger de Dampierre, segundo duque de San Lorenzo, y de la princesa italiana doña Vittoria Rúspoli, descendientes de los príncipes Poggio Suasa.
El 4 de marzo de 1935 contrajo matrimonio en Roma (Italia) con el infante don Jaime de Borbón, quien debido a su incapacidad física, ya que era sordomudo, renunció el 23 de junio de 1933 a sus derechos a la sucesión a la Corona española, que le correspondía por el fallecimiento de su hermano mayor, Alfonso, en favor de su otro hermano, Don Juan, Conde de Barcelona.
El matrimonio tuvo dos hijos: Alfonso, duque de Cádiz, que nació el 20 de abril de 1936, y Gonzalo, duque de Aquitania, nacido el 5 de junio de 1937.
Su primogénito, Alfonso, el duque de Anjou -título correspondiente al jefe de la Casa Borbón de Francia-, contrajo matrimonio con Carmen Martínez Bordiu, nieta mayor del general Franco, con quien tuvo dos hijos: Francisco (1972), que murió en un accidente de coche en 1984, y Luis Alfonso (1974).
Alfonso de Borbón y Dampierre, murió el 30 de enero de 1989 en un accidente de esquí en Colorado (Estados Unidos).
Su segundo hijo, Gonzalo de Borbón y Dampierre, se casó en tres ocasiones y murió en Lausanne (Suiza) el 27 de mayo de 2000 a consecuencia de una leucemia.
Actualmente, su nieto Luis Alfonso de Borbón es desde la muerte de su padre en 1989, el duque de Anjou y reconocido por los legitimistas como aspirante al trono de Francia.
Tras alcanzar la mayoría de edad en 1992, Luis Alfonso de Borbón asumió sus compromisos dinásticos.
En 1947 Emmanuella de Dampierre se divorció por lo civil en Italia del infante don Jaime, que murió en 1975, y dos años después contrajo matrimonio civil con el agente de bolsa milanés Antonio Sozzani, fallecido en enero de 2007.
En el año 2003 la figura de Doña Emmanuella saltó a la actualidad de la prensa rosa tras la publicación de sus polémicas memorias, en un libro escrito por la periodista Begoña Aranguren y en el que ella misma, residente en Roma, relataba sus vivencias.
En ese momento, se le reprochó en algunos medios que sacara a relucir su malestar con la familia real española, encabezada por Don Juan, blanco de sus ataques.
Al parecer, su malestar se debía al no haber sido ella recompensada económicamente y sus hijos reconocidos sus derechos dinásticos, tras el sacrificio hecho por su esposo al renunciar a sus derechos al trono en favor de Don Juan, padre del rey Juan Carlos I de España.