Panamá
El Sionmismo es literario
El Sionismo es el derecho a la tierra, a la siembra a la cosecha dentro de la más grande libertad humana.
- Virgilio Correa
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- - Actualizado: 28/1/2024 - 12:00 am
A nuestro entender el Sionismo es un símbolo estandarte de la Libertad dentro de la historia de la civilización judía cristiana. Un símbolo eterno. Solo los libertarios y hombre libres de palabra y actos pueden ser Sionistas, los demás pasarán a ser la escoria de la sociedad occidental.
"Cogito ergo sum", pienso luego existo. ¿Tal vez Descartes se basó en el Sionismo para construir su teoría".
A temprana edad aprendimos lo siguiente:
"El Éxodo es el segundo libro de la Biblia. Se trata de un texto tradicional que narra la historia del éxodo en la que los israelitas se rebelan contra la absurda esclavitud en Egipto por la fuerza de Yahveh (capítulos 1-12). Describe cómo Dios envía las diez plagas de Egipto para que el Faraón libere a los israelitas.
El Sionismo es rebelión por la Libertad y la Justicia igual ante la ley.
El Sionismo es la recompensa al absurdismo de la Vida o de la Existencia.
El Sionismo es existencia, el arte de existir y defenderse ante el opresor.
Los israelitas viajan entonces con el profeta Moisés al monte Sinaí (capítulos 13-18), donde Yahvé les promete la tierra de Canaán (la Tierra Prometida) a cambio de su fidelidad.
El Sionismo es el derecho a la tierra, a la siembra a la cosecha dentro de la más grande libertad humana.
Allí, entran en un pacto mosaico con Yahveh, y la redacción de los Diez Mandamientos y otras normas legales (caps. 19-24). Las instrucciones para construir el Tabernáculo, el medio por el que vendrá del cielo y habitará con ellos y los dirigirá en una guerra santa para poseer la tierra, y luego les dará la paz (caps. 25-31).
El Sionismo es un compromiso, es un acuerdo pactado con el Más Allá obedeciendo la ley de la Libertad.
El Sionismo es guerra para recuperar la Libertad y la Razón Alonso Correa, al momento de escribir nosotros este artículo publicó uno de los suyos, bajo el título del "Arte de existir", donde nos ilustra sobre: "La vida carece de sentido"….."somos prisioneros de nosotros mismos","porque la utopía en la que descansa nuestra mente no se parece, ni se parecerá jamás, al mundo en el que habitamos". El Sionismo es justamente una razón occidental para vencer todos esos males de la civilización occidental y de su propia existencia.
El Sionismo debe ser una clase por varios años en las escuelas occidentales públicas, privadas, mixtas, ricas, pobres, nacionales y extranjeras.
El Sionismo es la antorcha de las defensa de los derechos individuales y humanos de toda la civilización judío cristiana, incluyendo todas las religiones que reconozcan al Salvador de la Civilización Occidental en general, en contra de los opresores religiosos y descendientes del Oscurantismo fanático sin razón, solo por opresión y dictados.
Explicado nuestro aferramiento al sionismo desde muy temprana edad dado nuestro círculo familiar intelectivo e intelectual de ambos lados de la vereda familiar. No somos del gueto, somos de la Villa de la Libertad de 1821 que nos vio nacer un día de conmemoración de la Libertad Nacional. Una especie de Sionismo Santeño que nos dio la identidad.
Ahora queremos desmentir algunas glosas irracionales y falsas de analistas borrachos y/o discapacitados mentales que toman sus emociones por realidades y terminan mintiéndole a sus lectores,
La noticia falsa que circulaba la semana pasada desde Panamá, desinformaba sobre una especie de reticencia del Presidente Macron de Francia, de no querer ayudar a Israel con el ejército francés, dado el conflicto actual en el Medio Oriente.
Trataremos de analizar la falsa noticia con argumentos intelectivos e históricos que son de notoriedad pública, para los que conocemos las entrañas francesas desde hará pronto sesenta años y conocemos la lengua de Molière por encima de la mediana gala, logremos decir la verdad.
Emmanuel Macron, ante que todo tiene un nombre judío cristiano. No se llama ni Rachid ni Mohamed Macron. La historia nos dice que: “Emmanuel es un nombre bíblico presente en los relatos del Antiguo Testamento. Significa en hebreo “Dios está con nosotros”. El profeta Isaías designa al Mesías que viene con este nombre. Esta es la razón por la que se celebra el 25 de diciembre. Tal vez no practique pero lleva la huella nominal de un vestigio judío cristiano. Nunca traicionará a Israel.
Macron nació en la Tierra de la primera residencia de los Papas católicos de 1309 al 1418 en Avignon. Sin bien hoy en día invadida por los musulmanes, los edificios pápales aún siguen allí y el aire será eternamente judío cristiano.
En los pasos perdidos y las alcobas medievales del “Tout Paris”, lugares no aptos para incultos y falsos profetas de la información y que no hablan bien la lengua de Voltaire, se cuentan las fábulas y leyendas de que la banca ROTHSCHILD coptó à Emmanuel, gracias a su gran amigo Serge Weinberg, hoy esposo de Felicité Herzog, que conocimos de niña en Chamonix.
En 2017 un diario prestigioso de Francia dijo: “La comisión Attali (de origen judío) permitió a Macron codearse con grandes empresarios, como el propietario de la compañía de seguros Axa, Claude Bébéar [Opus Dei], el presidente de Nestlé, Peter Brabeck; o el gestor de fondos de inversiones Serge Weinberg. De hecho, este último lo promocionó como gerente asociado del Banco Rothschild en Francia”.
Finalmente, el último cambio de gobierno de Francia hecho por Macron es atinado y correcto. Alejar a los socialistas del Ejecutivo para que NO ocurra lo que ocurrió con el Frente Popular en 1936. Dándole un golpe de timón a la nave Francia, enviándola así un poquita más a la derecha y al epicentro del Sionismo, que ya salvó a Francia de los nazis inmundos y opresores de la libertad de todo un continente y el mundo entero.
Se fueron los ministros débiles con la defensa del Sionismo y con una mirada coqueta hacia los faraones de Hamas y Hezbollah, sobre la premisa de los falsos derechos humanos, que ellos no respetaron nunca desde Egipto.
Vinieron otros ministros, en su mayoría con lazos familiares con Israel, así como el Primer Ministros y sus mentores de origen judío. El Hexágono es pro Israel, aunque los 2 millones de musulmanes hagan sus necesidades cotidianas en esa tierra judía cristiana que es Francia, según la historia milenaria, desde las Cruzadas celestiales.
Francia, como el Reino Unido y los Estados Unidos estarán siempre en deuda con la palabra SIONISMO en la civilización occidental, y como dijo aquel viejo filósofo, a los necios anti sionista hay que dejarlos que se queden ciego por mirar al eclipse sin protección. Allá ellos y los anti sionistas.
Así que si mañana Israel requiere de las tropas francesas, tengan la plena seguridad que Francia irá a defender a los Sionistas de Israel. Por el momento ese no es el caso, los Sionistas saben defenderse muy bien desde los tiempos faraónicos.
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