Medicamentos vencidos
Publicado 2005/06/13 23:00:00
El lunes 13 de este mes, en la página A3 bajo el título "Cuidado al desechar medicamentos vencidos", publicamos un trabajo acerca del peligro que implica para la salud colectiva el desecho de medicinas sin medidas preventivas.
Por lo anterior, consideramos que se hace imperativo un programa de difusión para el público a fin de que no se echen a la basura los medicamentos ya vencidos o en desuso.
También es preocupante la enorme cantidad de productos que desecha anualmente la Caja de Seguro Social. La mayoría de éstos, por altas sumas de dinero, tiene su origen en compras, por amiguismo o por contubernio criminal por parte de los vendedores con los que otorgan triunfos en licitaciones para comprar medicamentos que carecen de eficacia.
La política de compras en las licitaciones no debe ser la de otorgarle el suministro al mejor postor. Tiene que haber una junta técnica que determine en cada caso cuáles de los productos que se ofrecen son los realmente eficaces. Y solamente los así clasificados, serán los que podrán participar en las licitaciones. Inclusive, si hay un producto de cuya eficacia carecen todos los demás interesados, no se podrá declarar desierta la licitación, y hasta adjudicarle la orden de compra sin ella, si no lo bueno no tiene contendor alguno.
No abrigamos la menor duda de que por ética, hay médicos que se abstienen de recetar medicamentos que saben que son carentes de eficacia. Estos permanecen almacenados hasta su fecha de vencimiento y hay que botarlos.
Estamos convencidos de que en el contubernio entre sobornos y sobornados ha existido mucho enriquecimiento ilícito por la práctica corrupta y criminal de comprar a sabiendas cosas de poca o ninguna eficacia.
Por lo anterior, consideramos que se hace imperativo un programa de difusión para el público a fin de que no se echen a la basura los medicamentos ya vencidos o en desuso.
También es preocupante la enorme cantidad de productos que desecha anualmente la Caja de Seguro Social. La mayoría de éstos, por altas sumas de dinero, tiene su origen en compras, por amiguismo o por contubernio criminal por parte de los vendedores con los que otorgan triunfos en licitaciones para comprar medicamentos que carecen de eficacia.
La política de compras en las licitaciones no debe ser la de otorgarle el suministro al mejor postor. Tiene que haber una junta técnica que determine en cada caso cuáles de los productos que se ofrecen son los realmente eficaces. Y solamente los así clasificados, serán los que podrán participar en las licitaciones. Inclusive, si hay un producto de cuya eficacia carecen todos los demás interesados, no se podrá declarar desierta la licitación, y hasta adjudicarle la orden de compra sin ella, si no lo bueno no tiene contendor alguno.
No abrigamos la menor duda de que por ética, hay médicos que se abstienen de recetar medicamentos que saben que son carentes de eficacia. Estos permanecen almacenados hasta su fecha de vencimiento y hay que botarlos.
Estamos convencidos de que en el contubernio entre sobornos y sobornados ha existido mucho enriquecimiento ilícito por la práctica corrupta y criminal de comprar a sabiendas cosas de poca o ninguna eficacia.
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.