Próxima visita
Publicado 2001/08/18 23:00:00
- José Pineda
Cuando el Papa Juan Pablo II visite la nación ex soviética Armenia, el próximo setiembre, encontrará una iglesia católica disminuida y pequeña que gradualmente se reconstruye después de décadas de represión comunista.
La iglesia católica armenia establecida en esta empobrecida ciudad que había quedado allanada por un terremoto masivo el 8 de diciembre de 1988, con un saldo de 55,000 muertos y 50,0000 damnificados, estriba completamente en un clero extranjero y depende fuertemente de la ayuda externa para sobrevivir.
La iglesia católica existe predominantemente en 13 aldeas, en la parte oriental de Armenia, un país con una población de 3.3 millones, en una extensión dos veces la provincia del Darién. Región montañosa, boscosa, subtropical (gran irrigación), rica en minas de cobre, zinc, molibdeno, aluminio y mármol. Su capital es Erevan o Yerevan. Rodeada por Georgia, Azebaijan, Turquía e Irán.
La región oriental es la sección especialmente pobre de Armenia, más así luego del sismo destructor de más de 250 edificios de apartamentos en sólo la ciudad de Gyumri. Más de 10,000 personas todavía viven en viviendas transitorias. La antigua iglesia católica, que había sido usurpada por las autoridades soviéticas, hoy es un edificio de apartamentos.
Hace dos años, el sínodo de obispos de la iglesia católica decidió restablecer la práctica del rito oriental de la ordenación de sacerdotes, en parte para suavizar la escasez de sacerdotes, luego de la represión comunista. Esta iniciativa se tomó con extremado cuidado, dice el sacerdote de Bzoumammar, Padre Mikael Mouradian, sacerdote libanés, párroco y director de Cáritas de Armenia. Con la premiosa situación económica local, existe la tentación de buscar el sacerdocio como un modo de ganarse la vida, dice Mouradian, refiriéndose a las condiciones paupérrimas de viviendas que han propiciado la deserción de un millón de armenios en la última década hacia otras latitudes. Si ordenamos sacerdotes casados, esto abrirá la puerta para otros. Necesitamos estar absolutamente seguros que ellos lo harán por razones totalmente espirituales.
Actualmente, dos nativos de Armenia son diáconos, cada uno con su esposa y tres niños, se preparan para el sacerdocio. Preguntado si pueden ser ordenados durante la visita del Pontífice, respondió el Padre Mouradian con un "quizás".
La deprimente situación de la iglesia católica armenia arranca desde 1930, cuando 40 de los 70 sacerdotes que atendían en el área fueron asesinados por las huestes soviéticas o deportados en una campaña persecutoria por las autoridades comunistas.
Antes en el siglo, unos 100,000 católicos armenios, incluidos 130 sacerdotes, fueron masacrados por los turcos durante una campaña genocida que arrasó con las vidas de al menos 1.5 millón de cristianos armenios en 1915 solamente.
El Papa Juan Pablo II y el Patriarca Catholicos Karekin II de Etchmiadzin, Armenia, hicieron una declaración conjunta, el año pasado, en la que se referían al genocidio armenio y enfatizaban la importancia para ambas iglesias.
Cuando el Papa visite Armenia, se espera que beatificará al Arzobispo Ignazio Choukrallah Maloyan, el prelado de la iglesia católica armenia en Mardin, Turquía, donde fue asesinado en 1915. Un decreto del Vaticano reconociendo su martirio y despejando el camino hacia su beatificación, salió en abril de este año (Frank Brown, de Catholic News Service).
Armenia será visitada por el Pontífice Juan Pablo tentativamente del 22 al 27 de septiembre. Como en los viajes anteriores esta peregrinación incluirá momentos ecuménicos y ceremonias rindiendo homenajes a las minorías católicas que han sobrevivido a pesar de la campaña de desarraigo efectuada por la represión soviética.
El principal motivo de la peregrinación armenia del Papa es unirse a concelebrar los 1700 años de la Cristiandad en esa nación. La mayoría de los actos jubilares han sido organizados por la iglesia apostólica de Armenia, una rama de la iglesia ortodoxa, es decir, no católica. A diferencia de la visita a Ucrania, en que hubo una terrible y manifiesta oposición a su visita, de parte de los grandes líderes ortodoxos, en Armenia, en cambio, el jefe y líder de la iglesia ortodoxa, Catholicos Karekin II de Etchmiadzin, expresamente ha invitado al Sumo Pontífice. Con este gesto se desinfla la teoría suspicaz de Alexis II de Moscú y Vladimir de Kiev que a los cuatro vientos pregonaban que la visita a Ucrania iba a ser el detonante de una exacerbación masiva de las tensiones ecuménicas sobre el reclamo de parte de la Iglesia católica de las propiedades que durante el gobierno comunista le fueron usurpadas y sobre el hecho de que se iniciaría una campaña de proselitismo.
El 16 de julio pasado, el presidente ruso Vladimir Puttin, ofreció una entrevista a un periodista italiano del Corriere della Sera y al ser preguntado sobre la peregrinación del Papa a Ucrania, afirmó que "en cuanto al aspecto religioso de esa peregrinación él no emitía opinión, sino que tendría que dejársela al patriarca suyo, pero que en otros niveles las visitas papales a las antiguas repúblicas soviéticas han tenido un profundo impacto. Juan Pablo II está haciendo mucho por el desarrollo de la religión católica y en adición, él hace una gran contribución para reafirmar la paz en el mundo". "Espera que las relaciones entre los ortodoxos rusos y católicos mejorarán..."
La iglesia católica armenia establecida en esta empobrecida ciudad que había quedado allanada por un terremoto masivo el 8 de diciembre de 1988, con un saldo de 55,000 muertos y 50,0000 damnificados, estriba completamente en un clero extranjero y depende fuertemente de la ayuda externa para sobrevivir.
La iglesia católica existe predominantemente en 13 aldeas, en la parte oriental de Armenia, un país con una población de 3.3 millones, en una extensión dos veces la provincia del Darién. Región montañosa, boscosa, subtropical (gran irrigación), rica en minas de cobre, zinc, molibdeno, aluminio y mármol. Su capital es Erevan o Yerevan. Rodeada por Georgia, Azebaijan, Turquía e Irán.
La región oriental es la sección especialmente pobre de Armenia, más así luego del sismo destructor de más de 250 edificios de apartamentos en sólo la ciudad de Gyumri. Más de 10,000 personas todavía viven en viviendas transitorias. La antigua iglesia católica, que había sido usurpada por las autoridades soviéticas, hoy es un edificio de apartamentos.
Hace dos años, el sínodo de obispos de la iglesia católica decidió restablecer la práctica del rito oriental de la ordenación de sacerdotes, en parte para suavizar la escasez de sacerdotes, luego de la represión comunista. Esta iniciativa se tomó con extremado cuidado, dice el sacerdote de Bzoumammar, Padre Mikael Mouradian, sacerdote libanés, párroco y director de Cáritas de Armenia. Con la premiosa situación económica local, existe la tentación de buscar el sacerdocio como un modo de ganarse la vida, dice Mouradian, refiriéndose a las condiciones paupérrimas de viviendas que han propiciado la deserción de un millón de armenios en la última década hacia otras latitudes. Si ordenamos sacerdotes casados, esto abrirá la puerta para otros. Necesitamos estar absolutamente seguros que ellos lo harán por razones totalmente espirituales.
Actualmente, dos nativos de Armenia son diáconos, cada uno con su esposa y tres niños, se preparan para el sacerdocio. Preguntado si pueden ser ordenados durante la visita del Pontífice, respondió el Padre Mouradian con un "quizás".
La deprimente situación de la iglesia católica armenia arranca desde 1930, cuando 40 de los 70 sacerdotes que atendían en el área fueron asesinados por las huestes soviéticas o deportados en una campaña persecutoria por las autoridades comunistas.
Antes en el siglo, unos 100,000 católicos armenios, incluidos 130 sacerdotes, fueron masacrados por los turcos durante una campaña genocida que arrasó con las vidas de al menos 1.5 millón de cristianos armenios en 1915 solamente.
El Papa Juan Pablo II y el Patriarca Catholicos Karekin II de Etchmiadzin, Armenia, hicieron una declaración conjunta, el año pasado, en la que se referían al genocidio armenio y enfatizaban la importancia para ambas iglesias.
Cuando el Papa visite Armenia, se espera que beatificará al Arzobispo Ignazio Choukrallah Maloyan, el prelado de la iglesia católica armenia en Mardin, Turquía, donde fue asesinado en 1915. Un decreto del Vaticano reconociendo su martirio y despejando el camino hacia su beatificación, salió en abril de este año (Frank Brown, de Catholic News Service).
Armenia será visitada por el Pontífice Juan Pablo tentativamente del 22 al 27 de septiembre. Como en los viajes anteriores esta peregrinación incluirá momentos ecuménicos y ceremonias rindiendo homenajes a las minorías católicas que han sobrevivido a pesar de la campaña de desarraigo efectuada por la represión soviética.
El principal motivo de la peregrinación armenia del Papa es unirse a concelebrar los 1700 años de la Cristiandad en esa nación. La mayoría de los actos jubilares han sido organizados por la iglesia apostólica de Armenia, una rama de la iglesia ortodoxa, es decir, no católica. A diferencia de la visita a Ucrania, en que hubo una terrible y manifiesta oposición a su visita, de parte de los grandes líderes ortodoxos, en Armenia, en cambio, el jefe y líder de la iglesia ortodoxa, Catholicos Karekin II de Etchmiadzin, expresamente ha invitado al Sumo Pontífice. Con este gesto se desinfla la teoría suspicaz de Alexis II de Moscú y Vladimir de Kiev que a los cuatro vientos pregonaban que la visita a Ucrania iba a ser el detonante de una exacerbación masiva de las tensiones ecuménicas sobre el reclamo de parte de la Iglesia católica de las propiedades que durante el gobierno comunista le fueron usurpadas y sobre el hecho de que se iniciaría una campaña de proselitismo.
El 16 de julio pasado, el presidente ruso Vladimir Puttin, ofreció una entrevista a un periodista italiano del Corriere della Sera y al ser preguntado sobre la peregrinación del Papa a Ucrania, afirmó que "en cuanto al aspecto religioso de esa peregrinación él no emitía opinión, sino que tendría que dejársela al patriarca suyo, pero que en otros niveles las visitas papales a las antiguas repúblicas soviéticas han tenido un profundo impacto. Juan Pablo II está haciendo mucho por el desarrollo de la religión católica y en adición, él hace una gran contribución para reafirmar la paz en el mundo". "Espera que las relaciones entre los ortodoxos rusos y católicos mejorarán..."
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.