Un homenaje a Demetrio Korsi

Existen obras y autores que marcan la vida de personas y pueblos de manera indeleble, uno de estos es definitivamente Demetrio Korsi.

Confieso que en los intensos años colonenses de mi adolescencia y juventud, sus prosas y sus versos fueron animadores de pensamientos y sentimientos, de rebeldías y propuestas.

Entre su variada obra, el poema Incidente de Cumbia, estremeció a nuestra generación inserta en un Colón aprisionado en un medio de un enclave colonial, y contestatario permanente de una realidad que lo aprisionaba.

Años después inspirándome en el poema y sus personajes, y como homenaje a Korsi, escribí en 1993, la obra teatral LA CANTINA DE PANCHA MANCHA donde intenté desarrollar a partir del poema un propuesta dramatúrgica más amplia, que integraba una treintena de personajes.

Partí del hecho que el poema no era una obra histórica pues no aparece lugar ni fecha, sino una situación que era proyectable a diversos contextos,por ello situamos en el ambiente de la ciudad de Colón de los años cuarenta.

La obra teatral la ubicamos en la línea de la Opera de Los dos centavos de B.

Brecht y la Opera do Malandro de Chico Buarque.

En 1994 La Cantina de Pancha Manchá queda de primer finalista del XXIV Premio Internacional Tirso de Molina.

España, luego es publicada en edición limitada por Ediciones Portobelo, Panamá 1997.

Fue estrenada en 1999 en el Teatro Nacional de Panamá bajo la dirección de Iván García, luego montada por la Asociación Teatral Lourdes en el 2001, dirección de Anselmo Cooper, y obtiene el Primer Premio del Festival de Teatro Estudiantil Panameño 2001, más adelante es puesta en escena por el Grupo Tablas y este año por Unidad de Teatro Colonense (UTEACO) en la Ciudad de Colón.

Es oportuno expresar que como autor no he recibido ningún beneficio económico de la edición o montaje de la obra teatral.

Eso sí, cada puesta en escena significó un homenaje al autor del poema que inspiró la obra y también mi vida, Demetrio Korsi, y esto se afirmó en cada representación.

Como mencioné, UTEACO, coordinado por Anselmo Cooper y Dagoberto Chung, montó la obra hace unas semanas a beneficio de las obras sociales.

Vale la pena ampliar que el UTEACO tiene más de quince años de labor incansable en muchas comunidades de su provincia e incluso del país y el exterior.

Ellos enfatizan que el teatro es un recurso educativo y una alternativa cultural frente a la violencia que se posesiona de las calles y comunidades colonenses, y que tiene el rostro del desempleo, la pobreza, la delincuencia.

Dicen: "El teatro no puede hacerlo todo, pero con el teatro podemos hacer algo necesario: Abrir el diálogo, resaltar las cosas buenas que cada uno tiene, soñar con un mundo diferente y construirlo desde el aquí y el ahora que vivimos".

Este trabajo cultural tiene su marco de referencia en el trabajo pastoral de la Iglesia Católica de Colón.

Entusiasmados por la buena acogida y el derroche de talentos colonenses, Marcos Lim de la APEDE de Colón, le propone a UTEACO presentar una función en la ciudad de Panamá el 18 de noviembre, como un estímulo a la labor cultural de los teatristas colonenses, pero la obra no se presentará.

Una vez hace algunos años, el Sr.

Demetrio Korsi III, hijo del escritor tomó contacto conmigo, y quedamos que nos veríamos para platicar sobre algunos aspectos del poema, pero sin plantearme una objeción o cuestionamiento de fondo sobre la obra teatral.

La reunión nunca se concretó.

Hace una semana, supe de una carta del Sr.

Korsi con copia a muchas personas, donde expresaba su disgusto por lo que entiende es una tergiversación de los hechos históricos del poema Incidente de Cumbia.

Le aclaré que en el poema no se señala esos hechos históricos, y que la obra se inspira en el poema, pero es en sí otro producto literario.

Le afirmé -tal como lo escribo ahora- que la obra es un homenaje permanente a su padre, y que no conocí objeción seria a la obra con anterioridad, pero eso si, que por ningún motivo, jamás, aceptaría ofender o molestar a los familiares del poeta Korsi.

Sobre la base de ello, le pedí al director de la obra suspender la presentación presenta o futura de la obra teatral La Cantina de Pancha Manchá, y ahora públicamente le presentamos disculpas a los familiares de ese extraordinario escritor de la Patria que fue Demetrio Korsi.

Agradezco profundamente la labor de los diversos grupos teatrales que realizaron la puesta en escena de la obra en especial a UTEACO, a Marcos Lim y sus colaboradores, y en especial al público entusiasta que vio o leyó esta obra, y que compartió en algún momento la magia del teatro.