Carrie y su esperanza profunda en el amor
La serie 'Sex and the City' estrenó en 1998 y finalizó en 2004. Se está a la espera del estreno de su continuación 'And just like that'... en su tercera temporada.
Carrie y su esperanza profunda en el amor
La actriz estadounidense Sarah Jessica Parker cumplió esta semana 60 años. Aun siendo una niña de 11 años debutó en el teatro con la puesta en escena de The Innocents y se ha mantenido activa en la actuación desde entonces.
Con papeles memorables como Sarah Sanderson (Hocus Pocus - 1993) o Rusty (Footloose - 1984), que la han llevado poco a poco al estrellato, a ser referente de la alta costura y una activista por el empoderamiento de la mujer en rasgos tan básicos como: que se les permita envejecer frente a la pantalla.
Pero, ninguno de sus personajes se compara con su papel de Carrie Bradshaw en la serie Sex and the City (1998 - 2004). Si bien Parker le dio ese toque de feminidad, picardía, cierta inocencia y estética al personaje, Carrie ya venía con una maleta de sentimientos desde el libro homónimo de Candace Bushnell, de donde se desprende la serie. Se puede decir que ambas se complementaron, porque si bien el personaje literario ya gozaba de cierta fama, la interpretación de Parker le dio un toque de humanidad. (Recordemos que un mal casting puede arruinar una producción).
Así, Carrie no solo catapultó y definió la carrera de Parker, sino que se convirtió en la voz del corazón de toda una generación. ¿Por qué? Porque quizás Carrie, más que nadie, cree en el amor.
Y el amor en todos los sentidos. Desde el amor propio: "Nunca olvides enamorarte de ti primero"; el amor entre amigos: "Dicen que nada dura para siempre: los sueños cambian, las modas van y vienen, pero las amistades nunca pasan de moda"; y claro, el amor romántico: "Aquello no era lógico, era amor."
Pero, Carrie no solo vive y disfruta de las mieles de Cupido, sino que no teme en cuestionarse, replanteárselo, experimentarlo y preguntarse si todas las relaciones deben ser iguales, si la fórmula establecida socialmente es la que toda pareja debe lograr alcanzar o si quizás hay algo más, un punto donde cada persona sea libre de decidir cómo amar y ser amada, y cada pareja establezca parámetros propios de cómo amarse: "Algunas historias de amor no son novelas épicas. Otras son cuentos cortos, pero eso no las hace menos llenas de amor."
Claro, también está la contraparte: el desamor. Y es que durante cada temporada de Sex and the city y su continuación And just like that…, el corazón de Carrie está en juego. Y como en todo partido el marcador no siempre está a favor. "Después de que se fue, lloré durante una semana. Y entonces me di cuenta de que sí tengo fe. Fe en mí misma. Fe en que algún día conocería a alguien que estaría seguro de que yo era la indicada."
Bajo estos contextos no es de extrañar el porqué de la iconicidad de Carrie y reconocer el trabajo de Sarah Jessica Parker en darle vida. Una le debe tanto a la otra, y los fanáticos de la serie están en deuda con ambas, porque al final el departamento de sistemas siempre tiene razón: "los ordenadores se estropean, la gente muere, las relaciones se rompen. Y lo mejor que podemos hacer es respirar y reiniciar".