Gama de colores... las bougainvilleas

Es considerada una de las plantas más hermosas durante la temporada de verano por sus coloridas y variadas flores; también florece dependiendo del clima y de los cuidados.
Las bougainvilleas conocidas en Panamá como veraneras, son originarias de las zonas tropicales y subtropicales de América del Sur. Son plantas consideradas como enredaderas, se sujetan a otros arbustos por medio de las poderosas púas que se encuentran en sus tallos.
Estas plantas pueden alcanzar los 10 metros de altura si están plantadas en el suelo, si se encuentran en un pote o maceta, dependerá del tamaño de la misma. El tamaño de este arbusto permite que sea utilizado como un elemento decorativo en la fachada de una residencia o columna; para su fijación a este tipo de arquitectura es conveniente realizar algunas ataduras que le darán forma a la estructura. Estas plantas pueden alcanzar fácilmente los 10 metros de altura si están plantadas en el suelo.
Sus flores son vistosas y se forman por las brácteas, de vivos colores, que abarcan toda la gama desde el blanco puro, blanco sucio, todos los amarillos y anaranjados, toda la gradación de rojos desde carmín a cereza, pasando finalmente a toda la gama de morados, desde uno tenue hasta el morado vibrante con la luz del sol.
Las Bougainvilleas son poco resistentes a las corrientes heladas. Los colores de las flores indican su resistencia al frío. En la lista de colores anteriormente detallada, cuanto más cerca del blanco menos soportan el frío. Las moradas o rojo amoratado soportan heladas moderadas con tal de que el suelo esté seco.
Una lluvia invernal acompañada de frío, aunque no hiele, casi seguro que acabará con esta planta. En situaciones límite puede convenir acolchar la parte baja del tronco y las raíces en invierno, evitando también que les llegue el agua de la lluvia (quizás con plásticos por encima del acolchado, sujetos con piedras).
El único requisito que exigen las veraneras, es que el suelo se encuentre siempre en condiciones perfectas de drenaje. No tienen exigencias especiales en cuanto al tipo de suelo, adaptándose muy bien a los de tipo arcilloso con tal de que no estén encharcados. Tolera bien el ambiente marino.

Su nombre proviene del almirante Louis de Bougainvillea, quien en 1768 descubrió esta planta mientras realizaba un viaje por Brasil.

La reproducción puede hacerse por varios métodos:

1. Esqueje semi leñoso: Se trata del crecimiento del mismo año tomado al final del verano. Se planta en un substrato arenoso, húmedo (no mojado).

2. Esqueje leñoso: Estaquilla de un año que se planta en invierno en condiciones similares al anterior.

La poda es un ejercicio de inteligencia, paciencia y amor. Hay que tener presente que las veraneras florecen sobre la madera del año anterior.
Las ramas que se disparan por la parte superior de la planta, se cortan durante el verano, con el fin de mantener el arbusto más poblado por abajo y, al mismo tiempo, limitar la altura a unos seis metros o al tamaño que usted guste.
Si desea, cada cinco años aproximadamente puede realizar una poda intensa, cortando todas las ramas largas a una longitud de 30 cms. para que queden muchas ramitas pequeñas por donde brotará la planta uniformemente.
Los riegos deben ser escasos en verano, un poco más frecuentes durante la floración y totalmente nulos en invierno. Puede darse el caso de que se observe que las hojas están algo mustias en la hora del sol más fuerte. No hay que preocuparse ni tampoco regar. La planta se recuperará al cabo de pocas horas.
Salvo en el caso raro de que se detecte alguna carencia concreta debida al tipo de suelo, no hace falta abonarlas nunca.
En cuanto a plagas, pueden ser atacadas por pulgones, ácaros, cochinillas y mosca blanca que serán controlados con los insecticidas correspondientes. También son atacadas por unas avispas que cortan círculos perfectos en los bordes de sus hojas. Sin embargo, la planta es muy resistente a todos estos ataques, por lo que no hace falta estar rociando continuamente el plaguicida.