Los eternos opuestos

Los polos opuestos se atraen y en este caso, son los mejores aliados. La decoración en blanco y negro siempre ha representando un sello de elegancia y glamour, tanto así que es utilizado para la confección de muebles, adornos, complementos y hasta es una constante en los diseños de alta costura.

Emplear estas tonalidades para ambientar una cocina, sala o recámara es garantía de un espacio diferente y que llamará la atención.

Para conocer más al respecto hablamos con la decoradora de interiores, Julissa Velasco, quien explicó que esta unión ha protagonizado un sinfín de proyectos habitacionales tanto en nuestro país como en el extranjero. El balance que existe en la luminosidad de uno y en la oscuridad del otro es lo que hace de esta combinación, un dúo interesante.

Velasco agregó que utilizando estos colores se logran ambientes sofisticados, depurados y muy actuales.

A pesar del efecto impresionante que se alcanza con estas tonalidades, la armonía final de la habitación debe ser total. Por lo que es necesaria una arquitectura y accesorios que se compenetren con el estilo que se desea lograr.

El blanco ha sido por mucho tiempo, el preferido para las paredes de las viviendas, esto debido a lo fácil que es agregarle detalles en otros colores.

Una buena opción donde destaquen ambos tonos es utilizar muebles blancos con alfombras negras, paredes blancas con lámparas negras o sofás blancos con cojines negros.

Esta dupleta es adecuada para cualquier área de su residencia.

La elegancia de estos tonos clásicos, contrastados aportan sobriedad y prestigio al hogar. A partir de esta combinación cromática, es posible lograr que cualquier rincón luzca atractivo. Además, una de las ventajas del blanco es que da la sensación de mayor espacio.

Existen dos variantes. Si su vivienda es pequeña, lo más conveniente es utilizar en mayor proporción el color blanco con detalles en negro. Si por el contrario es amplia con una altura aceptable, utilice el negro y accesorios en blancos.

Esta tendencia en efecto dominó es la predilecta en el estilo minimalista, donde imperan el estilo simple, las líneas puras y los espacios visualmente despojados.