Rossana Uribe, exitosa madre

El trabajo, la profesión y el rol de madre se logra combinar haciendo malabarismos como en un circo, sostiene Rossana Uribe, porque en el trayecto ha tenido muchas dosis de inventiva, sacrificios, buen humor, mano dura cuando es necesario, pero también mucho amor, cariño, fuerza, comprensión y al mismo tiempo firmeza.
En la época de infancia de sus hijos, Rossana Uribe se divorció y le tocó por un tiempo considerable estar a cargo de la familia, lo que la hizo ser aún más responsable y ofrecerle lo mejor a sus hijos.
"Llegó una época en que tenía tres empleos, trabajaba en Canal-4, en la embajada de Francia y hacía toda la publicidad de la tienda Lurias, además de cualquier otra oportunidad que cayera". Recuerda que esa etapa fue muy difícil porque sus hijos eran pequeños (6 y 3 años) y era consciente de que a esa edad la necesitaban mucho, pero gracias a Dios, Panamá es una ciudad pequeña, en la que se puede llegar a cualquier lugar en poco tiempo, lo cual le permitía ir entre ratos libre a su casa para no estar tan ausente físicamente y estar pendiente de todo. Ah, "eso sí, a pesar de sus muchas ocupaciones, los sábados y domingos los dedicaba exclusivamente a Juan y Rocco.
Sobre su etapa de madre soltera, considera que aprendió a respetar a quienes viven esa situación, porque ella tuvo la suerte de tener siempre buenos empleos y posición económica y no tener que "cortarse las venas" para pagar los gastos, porque el padre de los chicos asumió su responsabilidad al divorciarse.
INFLUENCIA EN SUS HIJOS
Rossana acepta emocionada que la trayectoria de su vida ha influenciado mucho en la de sus hijos, aunque de manera diferente en cada uno; sin embargo, ambos han sido partícipes de su responsabilidad, honestidad y disposición al trabajo y lo han absorbido muy bien.
En este sentido, señala orgullosa, que Juan heredó su fuerza, su tenacidad, querer ir siempre más allá e ir en busca de la perfección, mientras que Rocco heredó todo lo anterior y su vena artística. "Voy a tener un hijo economista y otro cineasta, lo cua me lleva a pensar en que mi influencia ha ido más allá de lo que había imaginado", indica emocionada.
LOS RECONOCEN EN LA CALLE
Comenta que es curioso, porque la nueva generación, amigos de sus hijos no la recuerdan. A veces cuando va a algún lado con Rocco, la gente lo reconoce y a ella como su mamá , por lo que se siente complacida. No obstante, Rocco interviene diciendo que, antes a él lo reconocían por ser el hijo de Rossana Uribe y eso lo emocionaba y aún hay gente que le dice "ah, tú eres el hijo de Rossana Uribe", por lo que se siente muy orgulloso.
UNA ESTRECHA RELACION
Precisa que disfruta mucho hablando con sus hijos, conociendo a sus amistades y se lleva muy bien con la novia de su hijo mayor y es que desde pequeños ha existido confianza y libertad para hablar de todo.
Agrega que sus hijos la conocen en lo bueno y en lo malo, al punto que se toman la libertad de psicoanalizarla y darle consejos y sugerencias en la vida personal y profesional, esto le resulta simpático, porque después de haberlos formado, ahora son ellos los que sienten la responsabilidad de ayudarla y orientarla.
Rossana ahora está al frente de un negocio privado -no tan alejado del mundo de la comunicación- y cuando necesita ayuda se la pide a su hijo Juan que estudia economía, pero sobre cine, teatro y televisión, Rocco es el indicado.
Aclara que si ha logrado o no el éxito como madre, en el futuro podría dar una respuesta más certera, aunque con dos hijos "ya grandes", Juan, quien estudia economía en una universidad fuera del país, y Rocco, quien en unos días se gradúa de secundaria, se atrevería a decir: "sí lo he logrado", aunque no duerme hasta que sus hijos no lleguen.