Michael Jackson estaba enamorado de Emma Watson

Siete años han pasado desde la muerte de Michael Jackson y sin embargo, la polémica que rodeó la vida del cantante sigue viva. Durante su carrera artística el rey del pop tuvo que demostrar en varias ocasiones que era inocente de las acusaciones sobre pedofilia que recaían sobre él. Ahora unas nuevas revelaciones hechas por el doctor Conrad Murray –encontrado culpable en 2011 de homicidio involuntario por la muerte de Jackson- en su libro This Is It vuelven a poner en el ojo del huracán el nombre del intérprete,publica El País. (VEA TAMBIÉN: Michael Jackson no violó a Macaulay Culkin: la verdad detrás del escándalo) Según el libro digital -que saldrá a la luz esta semana-, y del que Murray ha dado un adelanto al periódico The Mirror, el músico estaba completamente enamorado de dos chicas, ambas menores de edad. La primera era Harriet, hija de un amigo de él, y la segunda la protagonista de la saga de Harry Potter Emma Watson. El médico asegura que Jackson quería mantener una relación sentimental con Harriet, que en ese entonces tenía 12 años. “Michael se enamoró de Harriet cuando ella apenas tenía cinco años. Cuando cumplió 12 se fijó aún más en ella”, contó Murray a The Mirror. Además, añadió que el cantante de Thriller, tenía la intención de reunirse en Londres con el actor Mark Lester, padre de la niña para proponerle matrimonio. Sin embargo, lo que más ha llamado la atención ha sido la supuesta confesión que Jackson le hizo a Murray, en la que le manifestaba su amor por Emma Watson. Al parecer, la intérprete de Hermione un buen prospecto para novia. “Michael me dijo que estaba flechado por la actriz británica. Se había enamorado de ella cuando la vio en la primera película de Harry Potter en 2001, cuando ella tenía solo 11 años. Emma era su segunda opción para una boda si las cosas no funcionaban con Harriet”, asegura el médico. El doctor nunca se atrevió a cuestionar directamente a Jackson sobre las acusaciones de abuso infantil que cayeron en su contra, pero en el libro señala que “una cosa era clara: la manera en que Michael hablaba de jóvenes chicas no era como de un enamoramiento inocente sino de un amor no correspondido”. Según el libro, Michael además solía vestirse de payaso y usar máscaras para relacionarse con damas de compañía y además para que no lo reconocieran imitaba acentos árabes.