Colombia crea una nueva agencia de inteligencia tras haber liquidado anterior

El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, presentó hoy la nueva agencia de inteligencia creada tras la liquidación este lunes del anterior servicio secreto, Dirección Administrativa de Seguridad (DAS), sumido en un escándalo de escuchas y de infiltración paramilitar.

"Tal vez en ningún otro caso era este ejercicio tan urgente como en el de la inteligencia civil.

Y por eso hemos decidido crear desde ceros una nueva agencia que llevará el nombre de Dirección Nacional de Inteligencia", anunció el mandatario en declaraciones desde la sede presidencial, la Casa de Nariño.

Santos designó al director de esta nueva entidad, el excomandante de la Armada y almirante en retiro Álvaro Echandía Durán.

"Son muy pocas las personas en Colombia que tienen la experiencia en inteligencia del almirante Echandía, que tienen la credibilidad, el conocimiento y sobre todo que han demostrado, como lo vi yo cuando fue mi subalterno en el Ministerio de Defensa, una combinación igual de eficacia con rectitud", consideró.

El jefe de Estado colombiano reflexionó que al cabo de 58 años de trayectoria, el DAS dejaba al país andino en el último puesto del continente en materia de modernización de la inteligencia civil, y apuntó que todas las democracias sólidas han reorganizado o refundado sus servicios secretos en el último cuarto de siglo.

"Es triste pero cierto: los cambios en inteligencia nacen de las crisis.

Y hay que saber aprovechar las crisis", sostuvo.

El nacimiento de esta nueva agencia se enmarca en el proceso de reforma institucional y se suma a las reestructuraciones que se han practicado en el seno de la Policía Nacional y las Fuerzas Militares.

Esta nueva entidad no supondrá un mero cambio de nombre pues según explicó el gobernante "esta agencia será algo completamente nuevo, que nunca ha existido en el país: una agencia civil dedicada de manera exclusiva a tareas de inteligencia".

Santos detalló que la Dirección Nacional de Inteligencia "no tendrá facultades de policía judicial" y tildó de insano que la inteligencia pueda luego llevar a cabo capturas, una práctica que a su juicio evoca momentos sombríos de las dictaduras del Cono Sur.

Tampoco estará encargada de funciones de protección a personas amenazadas o en riesgo de estarlo, de control migratorio, ni de expedición de antecedentes judiciales.

"Esta agencia trabajará en silencio por el bien común", manifestó, y agregó que se busca la profesionalización a través de una nueva carrera profesional de inteligencia.

En los últimos 10 de sus 58 años de vida el organismo alcanzó su máxima cota de desprestigio, sobre todo en coincidencia con los dos Gobiernos consecutivos del expresidente Álvaro Uribe (2002-2010), que siempre ha negado tener que ver con los escándalos.

Los escándalos más sonados tienen que ver con las escuchas ilegales (chuzadas) y con la infiltración del paramilitarismo, que se lucró con información clasificada propiciando la muerte de al menos una persona, el defensor de los derechos humanos Alfredo Correa de Andréis.

El DAS hizo espionaje ilegal a periodistas, magistrados, políticos opositores, personalidades del exterior y defensores de derechos humanos, entre otros.

Por estos casos varios directivos y mandos medios del DAS están condenados y en prisión; y otros en etapa de juicio en diferentes instancias.