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Bienvenido presidente Carter
Carlos A. RodrÃguez / VÃctor Santos - Publicado:
Esta no es la primera vez que el ex Presidente Jimmy Carter visita a Panamá.Oficialmente ésta será la tercera vez que lo hace, pero privadamente ha estado en varias ocasiones para ver, conversar y tener una percepción propia de la marcha de los Tratados que llevan su nombre, de cuyo cumplimiento siempre ha sido un celoso vigilante.Contadora, donde fue huésped de mi hermano Gabriel y su esposa Nita, ha sido siempre para él y Rosalyn un sitio de predilección no sólo lo que la isla ha representado en la historia de las relaciones de Estados Unidos y Panamá, sino también, por su belleza, benigno clima y las templadas aguas que tiene.El Presidente Carter, junto con el General Torrijos fueron los arquitectos del Tratado que con justicia lleva sus nombres y que permitirá que en pocos días Panamá tome posesión, sin ningún tutelaje, de todo su territorio.Tanto Torrijos como Carter tuvieron que vencer distintos problemas internos en sus países.Carter tuvo siempre la oposición de un importante e influyente grupo de la derecha del Partido Republicano que se oponía y aún lo hacen a cualquiera concesión a Panamá.Torrijos, por su parte, tuvo que vencer la resistencia, que sectores de la extrema izquierda le hacían a los proyectos del tratado.Pensaban, esos grupos, en 1976 y 1977, que el año 2000 estaba muy lejano para que se cumplieran las aspiraciones que desde 1903 acariciábamos todos los panameños, además de la desconfianza que tenían hacia los EEUU.Tuvo el General Torrijos que demostrarles y convencer a esos grupos radicales de la confianza que tenía de que los norteamericanos cumplirían, como efectivamente lo han hecho, con todas las cláusulas del Tratado.Hoy, como el mejor reconocimiento a Torrijos, están los pronunciamientos favorables a dichos Tratados, de quienes más los adversaron y quienes exigen que éstos se cumplan al pie de la letra.Los nombres de Carter y Torrijos estarán permanentemente unidos en la historia de nuestros dos países.Un Torrijos con un claro concepto de Patria fue audaz y hábil negociador y el otro, Carter, que fue un visionario, con una formación espiritual de justicia y que logró que una nación grande y poderosa le devolviera a un país pequeño y pobre lo que le pertenecía.Ambos tuvieron un sentido de equidad al lograr los beneficios que ambos países se merecían, por los esfuerzos y sacrificios mancomunados que hicieron en la construcción de la vía interoceánica.Siempre he abogado y, estoy seguro que algún día será una realidad, por la erección de un gran monumento que resalte la cooperación panameña-norteamericana en la portentosa obra del Canal, en donde deberán ocupar un sitio de preferencia, entre otros, el Presidente Carter y el General Torrijos.Así como reconocimos en la Plaza de Francia la iniciativa francesa, debemos también hacerlo con la nación norteña.Carter, quien hoy nos visita y que estoy seguro, el pueblo lo recibirá con aprecio y simpatía, ya dejó huellas indelebles de su gran condición de estadista, con preocupación permanente por la paz mundial y el mejoramiento de las condiciones de vida de los marginados en todas las naciones del orbe.Además de la valentía y el coraje demostrados en las negociaciones del Tratado del Canal, donde pagó un alto precio personal: "la reelección presidencial", logró la paz de Israel y Egipto, y entre Israel y los palestinos, en sus complicadas gestiones de Camp Davis.En lucha, sin tregua, por que se respeten los derechos humanos han hecho de él, norteamericano contemporáneo de mayor prestigio en el mundo entero.Bienvenido Presidente Carter, nuestro país lo recibe con los brazos abiertos.