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Educación integral en sexualidad, ¿por y para qué?
Ginela Escala M./ - Publicado:
RECIENTEMENTE, en una encuesta de TVN, más del 60% reconoció que la educación sexual debería iniciarse desde kinder.Pero, ¿cómo, por qué y para qué esta educación? Panamá no escapa de la realidad global: Cada año ocurren al menos 111 millones de nuevos casos de infecciones de transmisión sexual curables y la mitad de todas las nuevas infecciones por VIH ocurren entre personas jóvenes.Hasta 4.4 millones de niñas entre los 15 y 19 años de edad buscan someterse a abortos - la mayoría de los cuales son inseguros.Un 10% de los partos en el mundo es de madres adolescentes, quienes tienen tasas mucho más altas de muertes maternas que las mujeres de mayor edad.Las tasas de abuso sexual reportadas oscilan entre 7% y 34% para niñas y entre 3% y 29% para niños.Cada cinco minutos una persona joven comete suicidio, con frecuencia, debido a problemas emocionales y sociales relacionados con su salud sexual y reproductiva, tal como la violencia sexual.Por ello, en 1994 la Conferencia de Población y Desarrollo realizada en El Cairo, puso en la agenda mundial de los gobiernos y la sociedad civil el tema de la salud sexual y los derechos reproductivos.Se reconoció explícitamente como un derecho humano, el derecho de adolescentes y jóvenes a acceder al disfrute de "una vida sexual satisfactoria y sin riesgo"; a disponer de información, atención y medios para alcanzar el nivel más elevado de salud sexual; a recibir atención a sus necesidades de enseñanza y servicios, de manera que puedan asumir su sexualidad sana y responsablemente.Hoy que tanto hablamos de educación, existe un enfoque que no puede quedar excluido, se trata de la Educación Integral en Sexualidad (EIS), una propuesta participativa basada en valores y que desarrolla habilidades interpersonales, tales como comunicación, toma de decisiones y negociación.Es un proceso de adquirir información y formar actitudes, creencias y valores acerca de la identidad, las relaciones y la intimidad, a lo largo de toda la vida.Incluye las dimensiones biológicas, socio-culturales, psicológicas y espirituales de la sexualidad.Aborda el desarrollo sexual, la salud reproductiva, las relaciones interpersonales, el afecto, la intimidad, la imagen corporal y los roles de género.La EIS entiende la sexualidad como una parte positiva y saludable de la vida, y enseña un comportamiento que es respetuoso, responsable, libre de explotación y violencia.Comienza con los padres y madres de familia u otras personas encargadas de la atención de las y los niños, en su papel de educadoras primarias en sexualidad.Reconoce la importancia de las comunidades, medios, instituciones e individuos que trabajan en colaboración con las familias, para criar niñas y niños sexualmente saludables¿Cuáles son los obstáculos para impulsar esta educación?a) Durante mucho tiempo la educación sexual para la juventud se ha visto obstaculizada por las preocupaciones de los adultos en cuanto a que los conocimientos fomentarán la promiscuidad entre los adolescentes.Sin embargo, estudios de la OMS/ONU indican que la educación sexual no fomenta el inicio prematuro de las relaciones sexuales, sino que puede demorarlas y conducir a un uso más consistente de anticonceptivos y prácticas sexuales más seguras.b) La retención de información o proporcionar información inexacta sobre esta tema es una violación de los derechos de las y los adolescentes.c) Los programas de educación en sexualidad que no son integrales (programas de sólo abstinencia hasta el matrimonio, y aquellos que usan tácticas para infundir temor, etc.)d) Iglesias, gobiernos y otras organizaciones con agendas diferentes, en especial cuando se sustituye el debate de ideas por una moral única basada en el miedo.e) A nivel internacional, el mayor financiamiento para programas de sólo abstinencia hasta el matrimonio, como los que están en el centro del nuevo plan de la Administración Bush para la participación de los EE.UU.en la prevención del VIH/SIDA a nivel mundial.La sólo abstinencia no es recomendable, pues aún las y los jóvenes que decidan no tener relaciones sexuales coitales, necesitan información acerca de la anticoncepción, los embarazos no deseados, enfermedades sexuales, para cuando decidan iniciar su vida sexual activa.Las personas que adquieren compromisos de sólo abstinencia, tienen un tercio menos probabilidad de usar anticonceptivos, cuando se vuelven sexualmente activas.Panamá debería contar con estrategias, políticas y programas consolidados, reconociendo la importancia de la familia para reducir la vulnerabilidad ante el VIH/SIDA, mediante la educación sexual y orientación de los niños, niñas y adolescentes en materia preventiva.Para el 2015, tener el 75% de los servicios de atención primaria de salud en el nivel nacional provistos de servicios de educación sexual, consejería, información y atención de la salud reproductiva.La reducción en un 10% en el 2011 del porcentaje de embarazos en adolescentes y en dos tercios para el 2015, e impartiendo en todas las escuelas educación sexual y reproductiva de manera obligatoria.Medios de comunicación, entidades educativas y cívicas deberían promover la EIS para apoyar la construcción de ciudadanía sexual definida como conciencia de los derechos humanos sexuales reproductivos; disponibilidad de servicios y recursos y la forma de tener acceso a ellos, participación, derecho a decidir, reconocimiento y comprensión de la amplitud de la diversidad de nuestras vidas por ejemplo, fe, cultura, origen étnico, estatus socioeconómico, capacidad/discapacidad, y orientación sexual (Fuente: Aplafa y IPPF)raulleisr@hotmail.com.