Panamá
Emmanuel Macron al borde del precipicio de la Bastilla 2026
- Virgilio Correa
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El 14 de julio del 2026 se cumplirán 200 años del Congreso Anfictiónico de Panamá y 237 años de la Revolución cruel francesa de 1789, en donde los ancestros de Macron le cortaron las cabezas al Rey y su familia. Desde entonces Francia vive días de tormentas sanguinarias sobre su legado social.
¿Juegas al ajedrez?
Mi abuelo paterno me dijo una vez hace setenta años que la política era como el juego de ajedrez. Fue mi primera lección de Ciencias Políticas a solo cinco años.
En el juego de ajedrez, el ahogado ("pat") es una situación en la que el bando que tiene el turno, pero que no está bajo el golpe de un jaque mate, ya no puede jugar una movida legal y o autorizada por el reglamento, a menos de hacer trampa. Dicho de otra manera: Se dice del jugador de ajedrez que, teniendo solo a su rey para jugar, y este no está en jaque, no puede jugar sin ponerlo en jaque mate, lo que hace que el juego sea un empate en honor al rey…...
¿Es Macron un tramposo? Así como sus fieles seguidores...
Entonces la partida se declara nula independientemente del material que quede en el tablero de ajedrez. El "pat" o ahogado termina insofacto el juego. Excepto si los actores o jugadores son sicópatas, o actúan al igual que actuaron con François Fillon.
La posición de Emmanuel Macron se parece aparentemente por lo que se cuenta en Francia al "pat" en francés o ahogado en español, pero el inquilino de los Elisios se aferra en un estado de ira surrealista en querer terminar un juego que casi no puede ganar a juzgar por el tablero frances actual, incluso imaginando que es un (falso) rey.
Nicolas Sarkozy le dijo a Le Figaro hace unas horas: "Para Macron el 8-9-25 no habrá otra solución que la disolución"
Al decidir poner su cabeza en la guillotina del palacio Borbón y las gonadas del Primer Ministro (en Diputados) y convocar a un voto de confianza allí, François Bayrou ha precipitado las cosas mientras el presidente ha estado tratando de estirar el tiempo desde junio 2024.
Pareciera que hay rollos entre el Jefe del Estado y el Jefe de Gobierno.
No hay mayoría, y mucho menos mayoría para votar una poción amarga para restablecer las finanzas públicas mientras el país se rebela contra la injusticia fiscal y social después de treinta años de parches. Francia está al borde del colapso.
El lunes 8 de septiembre, por lo tanto, es bastante probable que el fusible de Matignon salte bajo el asalto de la Izquierda y el RN juntos como ocurrió en julio 1789 y mayo 1968.
Sí, pero aquí, para el resto, el presidente está bloqueado. Anunció que no quería disolver, un gesto destinado a debilitar a Bayrou alentando a los diputados a censurar sin riesgo. Macron tiene miedo de disolver porque una nueva catástrofe política le sería fatal. Pero Sarkozy mucho más hábil que él ya dijo: "¡Tiene que disolver la Cámara de Diputados!".
Le queda el arma del referéndum, que agitó en vano hace unas semanas como un sable de madera, sin saber muy bien qué pregunta hacer. Y por una buena razón: en el estado del país, cualquier pregunta formulada por Macron tendrá un grande NO como respuesta. Los franceses y francesas están super emborrachados con el "guignol" de Macron.
Porque los franceses quieren verlo partir. Pero el problema es que no quiere irse, y no está obligado por la constitución a renunciar al poder hasta Mayo del 2027.
¿Una Francia bloqueada nuevamente?
Queda el artículo 16, que el presidente podría invocar si el 10 de septiembre condujera a una gran crisis social. Pero resolver un problema de confianza y legitimidad con un estallido de autoritarismo ilegítimo es como disparar a la multitud cuando pasó lo mismo con Luis XVI al día siguiente de Varenne.
La situación es inextricable y explosiva, porque las opciones de sustitución en Matignon son pocas para ganar algo de tiempo. Macron acabó con la magia de la Constitución de De Gaulle y la hizo cenizas. La situación constitucional es gravísima.
Hablan de Lecornu, ficha genuina del campo presidencial, pero sería -después de Barnier y luego de Bayrou- volver a una base común cuyo centro de gravedad es Renaissance, el partido que Francia quiso sancionar en junio de 2024. Ya el más de lo mismo expiró, la crisis profunda es inevitable.
Columna completa en www.panamaamerica.com.pa
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