Skip to main content
Trending
La Casa de Día para abuelitos presenta un avance del 90%¡Un 2025 en mayor calma! Este año ha habido menos sismos en comparación con 2024El Lago Gatún y la comunidad Emberá Quera un rincón por descubrir en ColónTrump llama 'tren descarrilado' a Musk y anticipa el fracaso de un tercer partido políticoDescubren doce especies de moscas, una de ellas en Panamá
Trending
La Casa de Día para abuelitos presenta un avance del 90%¡Un 2025 en mayor calma! Este año ha habido menos sismos en comparación con 2024El Lago Gatún y la comunidad Emberá Quera un rincón por descubrir en ColónTrump llama 'tren descarrilado' a Musk y anticipa el fracaso de un tercer partido políticoDescubren doce especies de moscas, una de ellas en Panamá
  • Actualidad
    • Política
    • Sociedad
    • Judicial
    • Provincias
    • Mundo
    • Aldea Global
    • Sucesos
  • Opinión
    • Columnistas
    • Confabulario
    • El Pulso
    • Trazo del día
    • Doña Perla
  • Economía
  • Variedades
  • Deportes
  • Tecnología
  • Multimedia
    • Videos
    • Podcast
    • Galerías
  • Especiales
  • e-PAPER
  • Contenido Premium
  • Recetas
  • Cine
Panamá América Panamá América
Inicio

Opinión / Galafate, el cuidador del palmar en la Boca de los Espinos

1
Panamá América Panamá América Domingo 06 de Julio de 2025
  • Secciones
  • Actualidad
  • Opinión
  • Economìa
  • Variedades
  • Deportes
  • Tecnología
  • Multimedia
  • videos
  • premium
  • e-papper
  • mis noticias
  • x
  • Mi cuenta
  • Mi perfil
  • Mis Noticias
  • Prémiate
  • Mis boletines
  • Seguridad
  • x
  • Notificaciones
  • videos
  • premium
  • e-papper
  • mis noticias
Abuelos maternos / Boca de los Espinos / Chiriquí Viejo / Cuidador del palmar / Finca / Galafate / Historias / Inolvidable / Pesca / Vacaciones / Verano

Anécdotas

Galafate, el cuidador del palmar en la Boca de los Espinos

Publicado 2021/10/21 00:00:00
  • Stanley Heckadon-Moreno
  •   /  
  • Seguir

En La Boca de los Espinos tenía el tío Salvador un gran palmar, entre la playa y el estero, con miles de palmeras de cuyos cocos se extraía copra enviada en sacos de henequén a Panamá, a las dos aceiteras que monopolizaban el negocio. Cuidaba el palmar Galafate, uno de mis héroes de infancia.

  • facebook messenger
  • Compartir en WhatsApp
  • x twitter
  • facebook messenger
  • facebook messenger

Noticias Relacionadas

  • 1

    Problemas verdes y gases grises

  • 2

    Sobre la paz de la conciencia

  • 3

    ¿Cómo convertir un negocio en empresa inteligente?

En el verano visitaba la finca de mis abuelos maternos a orillas del Chiriquí Viejo, armábamos expediciones de pesca por varios días a la Boca de Los Espinos, donde al Chiriquí Viejo se une al Duablo y el Piedras, antes de salir a la mar.  Foto: Cortesía del autor.

En el verano visitaba la finca de mis abuelos maternos a orillas del Chiriquí Viejo, armábamos expediciones de pesca por varios días a la Boca de Los Espinos, donde al Chiriquí Viejo se une al Duablo y el Piedras, antes de salir a la mar. Foto: Cortesía del autor.

Inolvidables eran las vacaciones de verano con mis primos en la finca de mis abuelos maternos a orillas del Chiriquí Viejo. Llegábamos los que estudiábamos en escuelas lejanas. La primera señal de liberación y ser gente de monte, era quitarse los zapatos.

Mal visto era andar enzapatado, cosa de "mijitos consentidos de pueblo". Debíamos andar con la pata en el suelo. Yo admiraba las encallecidas patas de los primos Nelson y Franklin, compañeros de pesca y exploraciones, imperturbables al caminar por los trillos de la selva o los areneros calientes de playones y playas.

Tras hacer tareas que debíamos hacer en la finca, rajar leña o pilar arroz y maíz, al subir la marea era hora de nadar. Los fines de semana pescábamos por las empalizadas o explorábamos la selva y los manglares.

También armábamos expediciones de pesca por varios días a La Boca, esto es la Boca de Los Espinos, donde al Chiriquí Viejo se unían las aguas del Duablo y el Piedras antes de salir a la mar. Cuando fui a la capital, a primer grado, escuché que en la Zona del Canal había un pueblo llamado La Boca. Pensé que de seguro era en honor a nuestra Boca de Los Espinos. Mas no resultó ser La Boca del río Grande, entrada pacífica del Canal de Panamá.

En La Boca de los Espinos tenía el tío Salvador un gran palmar, entre la playa y el estero, con miles de palmeras de cuyos cocos se extraía copra enviada en sacos de henequén a Panamá, a las dos aceiteras que monopolizaban el negocio.

Cuidaba el palmar Galafate, uno de mis héroes de infancia. Su nombre, Juan Quezada. Nacido en el puerto de Pedregal, hijo de un negro caucano que llegó con las tropas que envió el general liberal Tomás Cipriano de Mosquera. Galafate, era un carpintero de ribera, con prodigiosa memoria y vista aguda distinguiendo el color del plumaje de aves marinas distantes.

Galafate, había llegado en busca de alivio con mi tío Salvador, curandero de fama provincial, para una llaga que le sangraba y decía se la causó el maleficio que una mujer por la costa de Buenaventura.

Como sus historias me apasionaban, si ningún primo quería ir a pescar a La Boca, me iba solo en un bote y dormía en el gran rancho del palmar. Tenía techo de pencas y piso de arena. Abajo, el fogón de tres piedras y el sitio de estibar la copra. Al jorón subía por un escalón labrado del tronco de un palo de balsa. Al regresar de pescar le entregaba los pargos a Galafate y me acomodaba sobre los sacos de copra mientras él cocinaba y contaba sus aventuras.

VEA TAMBIÉN: La seguridad de un país no depende de hombres, sino de planes

Aburridos eran nuestros libros de historia. Fascinantes las historias de Galafate. De niño, fue marinero en las goletas que viajaban entre Pedregal y Panamá. Fue buzo de escafandra en tiempos de la bucería de perlas.

Recordaba cuando la Guerra de los Mil Días, siendo un joven marino en una goleta chiricana, anclaron a la media noche en la bahía de Panamá. Al amanecer, al lado les pasó El Almirante Padilla, vapor armado en guerra por los liberales, que de un cañonazo hundió al Lautaro muriendo el gobernador civil y militar del Istmo, el general Carlos Albán. Recordaba que el artillero fue un chileno, Valdelamar.

Suscríbete al newsletter #AlDíaConPanamáAmérica

Las noticias que importan directo a tu inbox

Cuando alguien iba a morir, Galafate lo presentía y decía que tenía "el hedor a muerte de Palo Negro". El más sangriento combate de la Guerra de los Mil Días donde, del 11 al 26 de mayo de 1900, unos 25,000 hombres se despedazaron a machetazos al grito: "echan pa'lante muchachos pa' que se acabe esta vaina".

Los del Chiriquí Viejo andábamos en botes, a palanca y canalete. Tempranamente debíamos conocer el río como la palma de la mano, fuese de día o de noche. Sus vueltas, la ubicación de los playones y la canal de navegación y los troncos sumergidos. Asimismo, conocer el estado de la marea por la altura de la luna en el cielo. Galafate usaba un viejo bote de remos, un chingo le llamaba, aparejado en ambas bordas con chumaceras donde colocaba los remos. Al desbordarse el río, en invierno, él subía remando contracorriente y cantando viejos cantos de la marinería y la bucería como este:

"Se quedan solas, se van volando

Los blondos nidos del forestal

Las mariposas se van volando.

Ya no hay sinsontes en este rosal.

Ángel querido, quiero que sepas

La triste historia de mi pasión"

Fue Galafate el primer comunista que conocí. Insistía en llamarme "Estalín, el hombre de La Rusia", por Jeseph Stalin. Sabía que yo estudiaba con los jesuitas y mi familia era conservadora, pero siempre me trató como igual, otro marinero de a bordo.

Antropólogo.

Google noticias Panamá América

Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.

Clasiguía
Clasiguía

Primer año de gestión

100 Días de Gestión

Contenido Patrocinado

Empresas enfrentan el desafío de proteger su operación digital ante ciberamenazas y fallos tecnológicos

Transforman ideas en negocios sostenibles en Donoso

Clientes de Caja de Ahorros se beneficiarán de pagos digitales con Yappy

¡Los nuevos Galaxy A56, A26 y A36 ya están en Panamá!

El juego cambia: Betcris se suma a la FPF para impulsar la pasión por el fútbol en Panamá

Últimas noticias

Así avanza  la Casa de Día para personas mayores. Foto: Cortesía/Mides

La Casa de Día para abuelitos presenta un avance del 90%

Los temblores son impredecibles.

¡Un 2025 en mayor calma! Este año ha habido menos sismos en comparación con 2024

Entre uno de los lugares, a los que los visitantes pueden acceder es la comunidad indígena Emberá Quera, situada a orillas del Lago Gatún, en el corregimiento de Limón. Foto. Cortesía

El Lago Gatún y la comunidad Emberá Quera un rincón por descubrir en Colón

Elon Musk junto al  presidente Trump. Foto: EFE

Trump llama 'tren descarrilado' a Musk y anticipa el fracaso de un tercer partido político

Imagen de la mosca  S. vexilliphallus.  Foto: Reemer & Mengual

Descubren doce especies de moscas, una de ellas en Panamá




Panamá América
  • Siguenos en:
  • videos
  • premium
  • e-papper
  • mis noticias
Buscar
Mapa del sitio
Clasificados
Publicidad
Grupo EPASA
Crítica
Día a Día
Mujer
Cine
Recetas
Impresos

Miembro de:

Miembro del PAL
Sociedad de prensa
Grupo EPASA

Todos los derechos reservados Editora Panamá América S.A. - Ciudad de Panamá - Panamá 2025.

Prohibida su reproducción total o parcial, sin autorización escrita de su titular.

Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios y mostrarle publicidad relacionada con sus preferencias mediante el análisis de sus hábitos de navegación. Si continua navegando, consideramos que acepta su uso. Puede cambiar la configuración u obtener más información "aquí".