EDITORIAL.
Juez y parte
Los magistrados del Tribunal Electoral no deberÃan asumir posiciones polÃticas ni a favor ni en contra de ningún partido polÃtico. Como garantes de los procesos electorales y
Los magistrados del Tribunal Electoral no deberÃan asumir posiciones polÃticas ni a favor ni en contra de ningún partido polÃtico. Como garantes de los procesos electorales y lÃderes de la principal entidad electoral del paÃs, deberÃan reservarse las crÃticas o señalamientos contra algún colectivo.
Los magistrados imparten justicia cuando se trata de asuntos electorales, por lo que entrar en un debate respaldando alguna tendencia polÃtica solo crea dudas sobre la real imparcialidad de sus actos.
Desde su tribuna como magistrados deberÃan impulsar soluciones negociadas a los temas electorales, más allá de crear un clima de confrontación y provocación.
La actuación del magistrado presidente del Tribunal Electoral, Gerardo SolÃs, en el debate de las reformas electorales es cuestionable. En muchas ocasiones, más que mediar e impulsar alguna clase de diálogo, se ha dejado llevar por el calor de la polÃtica y ha emitido comentarios que no son propios de un magistrado del Tribunal Electoral.
Incluso, ha especulado sobre las intenciones de los diputados oficialistas y ha abanicado posturas de lÃderes de oposición.
En vÃsperas de las elecciones generales es prudente que los funcionarios del TE, incluyendo los magistrados, se mantengan al margen de las pugnas polÃticas de los partidos. Panamá necesita que esa institución siga siendo garante de los procesos electorales y que su credibilidad nunca esté en entredicho.
El reglamento interno del TE es muy claro con respecto a las restricciones que tienen los funcionarios. Es necesario predicar con el ejemplo a todos los niveles.
En una institución tan sensitiva como esta, no se pueden dar el lujo de ser juez y parte de los temas que se ventilan.
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.