Panamá, la patria que se lleva en el alma

En estos días de noviembre, cuando la bandera ondea con más fuerza y los niños marchan con paso firme bajo sol y lluvia, uno no puede evitar sentir cómo se nos hincha el pecho de orgullo al decir con convicción: ¡Soy panameño! No es una frase vacía ni un adorno de ocasión; es una afirmación de identidad, de historia y de esperanza.

Celebrar la patria no se trata solo de recordar las fechas del pasado. Es también mirar el presente con compromiso y el futuro con optimismo. Panamá ha sido, y sigue siendo, un país que se levanta ante los desafíos. Lo hemos demostrado una y otra vez, cuando las circunstancias parecen adversas, el espíritu panameño crece, se reinventa, y encuentra la manera de seguir siempre adelante.

Hoy más que nunca, sintámonos orgullosos de nuestra gente. De los que nos levantamos antes del amanecer, de los estudiantes que sueñan con un mejor mañana, de los productores del interior que hacen patria con sus manos día a día, y de cada ciudadano que cumple con su deber sin esperar aplausos. Todos ellos son los verdaderos constructores de esta gran nación.

Nuestro país no es perfecto, pero tiene una identidad viva y una voluntad colectiva de salir adelante que muchos envidiarían. Esa es la esencia del ser panameño. Es el carácter alegre, pero firme, solidario pero determinado, que nos permite sobreponernos a las crisis y a celebrar nuestras victorias con humildad.

Ser patriota no es envolverse en una bandera solo en noviembre; es respetarla todos los días. Es trabajar con honestidad, defender lo justo, cuidar lo nuestro y enseñar a los más jóvenes que amar a Panamá no es una emoción pasajera, sino una forma de vida.

Que estos días patrios no sean solo desfiles y días feriados, sino una oportunidad para renovar el compromiso con nuestra tierra. Que cada uno, desde su espacio, contribuya a construir el país que soñaron nuestros próceres… siempre libre, justo, solidario y próspero!

Porque Panamá no es solo un istmo y un canal que une al mundo; es el corazón que late con orgullo entre dos mares. ¡Feliz mes de la patria, Panamá!