Corregimiento de los Limones jamás ha tenido una carretera

AL SON de la marea tienen que estar los moradores del corregimiento de los Limones, en el distrito de Barú, pues desde su fundación nunca han tenido carretera que les facilite el transporte para la entrada y salida del área.

En este sector viven más de mil personas que en su mayoría se dedican a la pesca y la agricultura, actividades principales que le permiten la supervivencia.

Hipólito Serracín, presidente de la junta local, consideró que una de las necesidades prioritarias es la construcción de la carretera porque no es posible que cada vez que hay marea alta ellos queden del otro lado, como si no fueran parte de este país.

Indicó que la inexistencia de la vía los afecta en todos los sentidos, pero más cuando tienen urgencias de salud, pues si la marea esta alta no pueden pasar y quienes enfrentan situaciones de enfermedad tienen que aguantar mucho sufrimiento hasta que la madre naturaleza se los permita.

En aspectos de agricultura también es difícil ya que a veces pierden toda la producción porque no puede sacarse y eso es lamentable para muchas personas que dependen de ello.

"Nosotros tenemos que viajar al son de la marea, cuando la marea seca y cuando no, no podemos viajar", dijo Serracín, quién consideró que esto genera muchos problemas y es una desventaja para ellos, ya que situaciones como esas no les permitido alcanzar un verdadero desarrollo.

Dijo que cuando los representantes de la presente administración estaban en temporada de campaña, les prometieron la construcción, pero a la fecha no se han manifestado y todo parase indicar que una vez más van dejarlo pasar por alto.

Manifestó que esto ha sido por toda la vida ya que la carretera hacia los Limones, nunca se ha cristalizado, por eso exigieron a la administración gubernamental que pueda asignar la partida económica para ejecutar la obra.

Apuntó que esta situación afecta el transporte público, el cual es obsoleto como consecuencia del daño constante que sufren los vehículos por la arena y el agua salada.

Dijo que más de mil habitantes están en espera de que se les brinde una oportunidad de vida diferente y que el desarrollo que tanto anhelan empiece con la construcción de la carretera.

Los moradores de esta comunidad hacen un llamado a las autoridades para que los apoyen en sus necesidades.