Cielo raso… elegancia única

EL CIELO raso más elegante y resistente está elaborado a base de yeso, hablamos de las planchas de gypsum.

Es una maravilla de la tecnología, es acústico, incombustible e indeformable.

Al entrar en cualquier tipo de edificación, la mayoría de las personas tienen la tentación de mirar hacia arriba y lo que encontramos es el llamado "cielo raso", el cual no siempre resulta agradable ante la vista.

Sin embargo han vuelto aquellos hermosos cielo rasos, que alguna vez estuvieron presentes con gran fuerza; pero, con el paso del tiempo fueron reemplazados por otros más económicos y de fácil instalación.

Observar la belleza y el diseño que se puede crear con este tipo de material, habla de inmediato sobre la experiencia del arquitecto o diseñador de la vivienda.

Sobretodo porque la apariencia es única en elegancia, presencia y estilo.

Estas piezas son tan adaptables que se utilizan en todo tipo de tendencia arquitectónica: moderna, clásica, neoclásica e incluso en las de apariencia rústica.

El yeso es el elemento protagonista en el cielo raso de gypsum.

Él es el responsable de la estética y de la alta resistencia que caracteriza a estos complementos decorativos.

Para crear estas planchas, el yeso se procesa y se refuerza con fibras minerales y vegetales.

Finalmente se agrega un aditivo para que se convierta en un producto resistente.

"Es importante señalar que son muchas las razones técnicas comprobadas, que consideran que estos cielo rasos son verdaderos aislantes acústicos y térmicos", así lo manifestó el arquitecto Gerardo Jaramillo Lezma.

Entre otras cosas, porque las planchas que lo forman oponen resistencia al paso del sonido que se propaga en el ambiente, por ejemplo en temporadas lluviosas usted podrá conciliar rápidamente el sueño.

Otra cualidad es que los materiales que lo forman, son totalmente anticombustibles, ante la presencia de fuego no se produce llama ni humo, por ende son una seguridad para usted y su familia.

Además, una vez instalado, se empiezan a disfrutar de una belleza única que durará por mucho tiempo y que mantendrá su forma inalterable por toda la vida.

Pueden ser utilizados en cualquier estilo de residencia.

Resultan agradables ante la mirada de quienes pasan por la estancia.

Su belleza dura por muchos años, sin perder su forma.

Son resistentes, acústicos, incombustibles e indeformables.