Fonseca Mora presenta nueva novela
Publicado 2007/04/21 23:00:00
[~socialest-1.jpg~ Ricardo Bustamante y Jeannette de Bustamante. ]
[~socialest-2.jpg~ Melissa de Fábrega, María Cristina Goitía y Enrique Goitía. ]
[~socialest-3.jpg~ Carlos Vásquez y Aram Cisneros. ]
[~socialest-4.jpg~ Daniel Domínguez, Marisa de Talavera y Marisa de Villareal. ]
[~socialest-5.jpg~ Susana Fonseca, Ramón Fonseca Mora y Raquel Fonseca. ]
[~socialest-6.jpg~ Ramón Jurado, Isolda De León, Jorge Consuegra, Irina de Ardila y Ricardo Ríos. ]
[~socialest-7.jpg~ Francisco Morales, Christopher Zollinger, Darlina de Zollinger e Isabel Morales. ]
[~socialest-8.jpg~ Ricardo Palma, Mabel de Palma y Argelis Herrera. ]
[~socialest-9.jpg~ Ernesto Broce, Isabel Vecchio, Rigoberto Coronado, Sara Montenegro y Stella Ortiz. ]
[~socialest-10.jpg~ Isabel de Zappi y Elvira Terán ]
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Semblanzas: ¿Y los asesinatos de periodistas?
AA: Esa es una de las cosas que mas preocupa a la UNESCO. Es intolerable lo que está pasando; prácticamente todas las semanas tenemos el asesinato de un periodista. Son resabios de esta cultura y por supuesto de la época tan difícil que estamos viviendo de los fundamentalismo, del terrorismo, del narcotráfico vinculados a movimientos parapoliciales, paramilitares, esa vinculación del narcoterrorismo; son escenarios donde denunciar esas cosas es someterse inmediatamente a la amenaza de eso grupos. Entonces, en el momento en que más bien deberíamos preocuparnos por este tipo de hechos, en que se están asesinando hombres y mujeres en América Latina por el hecho de ser periodistas, por ejercer el periodismo, por cumplir con la obligación de informar, nos estamos preocupando por esas viejas leyes del desacato o empeñarnos en sancionar la calumnia y la injuria desde el punto de vista penal, y no del civil; bueno porque el castigo penal es mucho más intimidante, porque lo que nos preocupa no es que existan estas leyes, sino el carácter de amenaza, de intimidación que estas disposiciones legales tienen. Se abusa, como se abusa de otros derechos y hay personas inescrupulosas que evidentemente se valen de determinados derechos para cometer fechorías y el periodismo no escapa a ese mal. Pero no podemos legislar por la excepción, por los casos aislados, porque estaríamos dañando lo normativo, la regla, lo normal en el desempeño del periodismo o en el derecho al libre acceso a la información pública o en el derecho a disentir.
Semblanzas: ¿En tu criterio afecta eso el fortalecimiento de las democracias en la región?
AA: Ahí esta la discusión. Lo que parece insólito es que en el momento en que la democracia en América Latina está amenazada, en que la democracia en América Latina pasa por un estado muy vulnerable, en que comienza a tener serias dificultades de sobrevivencia, ahí movimientos amparados perfectamente en la Constitución que comienzan de nuevo a rescatar, basados en esta cultura autoritaria, estas leyes de desacato, de castigar penalmente la injuria, de prohibir la publicación de determinados documentos, de perseguir las investigaciones, de disminuir la capacidad del periodismo de investigación. Y también hay que ver que pudiera haber medios de comunicación, o pudiera haber periodistas que actúan también con ese periodismo escandaloso o lucrativo al convertirse en esa especie de James Bond del periodismo. Es decir están los dos extremos y yo creo que hay que buscar os términos medios y que la propia sociedad, y el propio ordenamiento jurídico norme de tal manera la situación que ni unos ni otros puedan imponer sus puntos de vista. En estos momentos, cuando hay estas crisis de la democracia, debemos estar preocupados por cómo meter elementos, como añadir elementos y factores que nos hagan tener una mejor democracia y no restarle a la democracia, porque la democracia en estos momentos está sometida a terribles presiones, a terribles amenazas, no para disminuirla sino para desaparecerla, y volver nuevamente al militarismo, a los viejos escenarios que creíamos superados, sobre todo a un renacer el fascismo y del nazi fascismo, al gobierno militar como estilo de gobierno y estilo de vida, lo que es el fundamento del fascismo, y del estado todo poderoso, y la estatización de la vida civil, de la vida ciudadana y del ejercicio político. No podemos estatizar la democracia. En la democracia el Estado tiene que ser un Estado fuerte, eficiente, un Estado que en definitiva ayude, que gerencie el bien común, pero no un Estado que ahogue al ciudadano.
Semblanzas: ¿Y cómo estás viendo a Panamá?
AA: Panamá fue el primer país en América Latina en tener una ley de libre acceso a la información pública. Independientemente de lo que pasó luego, pero fue muy importante, lo que hizo el presidente Martín Torrijos, haber eliminado el decreto que entrababa totalmente la ley de libre acceso a la información publica. Y eso es un gran mérito de su gobierno, como también haber derogado algunas leyes mordaza. Eso es un haber muy importante que la UNESCO lo ha reconocido públicamente. Yo creo que eso es lo que tienen que hacer los presidentes, y eso es un signo de madurez democrática. El punto está en que en este momento lo que tenemos es que abogar para que la cultura del secreto se elimine, para que salga de nuestra vida social, para que podamos tener un libre acceso a la información, para que nos acostumbremos al pluralismo. El problema es que no nos acostumbramos al pluralismo, y por lo tanto no nos acostumbramos al disenso. Nos obsesionamos con el consenso, que es muy importante, pero también la democracia se caracteriza y se debe caracterizar por la existencia de condiciones para el disenso, porque el disenso es una forma de relación de la sociedad, y con el disenso estamos contribuyendo al desarrollo democrático tanto como cuando ponemos las condiciones para el consenso. Entonces consenso y disenso son propios de la democracia. En esto la profesora Ana Maria Miralles, de la Universidad Pontificia de Medellín nos ha ilustrado mucho cuando apunta a fomentar también el disenso en la sociedad. Y no tenerle miedo al disenso.
Semblanzas: ¿Existen áreas específicas donde se afecta el disenso, o donde el estado atenta hoy contra la libertad de expresión?
AA: En el espectro radioeléctrico. El que podamos terminar con ese estado tutelar por ejemplo del espectro radioeléctrico, tiene mucho que ver con el ejercicio de la libertad de expresión. Se produce cuando el estado utiliza su derecho de administrar el espectro radioeléctrico; el Estado no es el propietario es un administrador del espectro radio eléctrico, por lo que tiene que tener un organismo independiente de la administración publica que administre sanamente un bien finito como lo es el espectro radioeléctrico, para que sirva a todos y posibilite que la mayor cantidad de grupos organizados tengan acceso a ese espectro radioeléctrico, y no usarlo como el castigo o la recompensa, que creo que en este momento es uno de los aspectos que esta haciendo mas daño a la democracia en América Latina: te quito una concesión porque no eres de mi simpatía, porque no estoy de acuerdo con tus ideas, porque me estas haciendo daño, porque me estas atacando como gobierno entonces te quito la concesión. Yo creo que el espectro radioeléctrico como bien común, como bien finito, debe estar sometido a una autoridad que lo regule, pero que lo regule con justicia, con inteligencia y apelando siempre al bien común. Entonces son de esas cosas que hay que ir corrigiendo en la democracia, que tenemos que poner en la democracia, si es que queremos salvar la democracia. Si es que definitivamente América Latina quiere apostar por la democracia.
[~socialest-2.jpg~ Melissa de Fábrega, María Cristina Goitía y Enrique Goitía. ]
[~socialest-3.jpg~ Carlos Vásquez y Aram Cisneros. ]
[~socialest-4.jpg~ Daniel Domínguez, Marisa de Talavera y Marisa de Villareal. ]
[~socialest-5.jpg~ Susana Fonseca, Ramón Fonseca Mora y Raquel Fonseca. ]
[~socialest-6.jpg~ Ramón Jurado, Isolda De León, Jorge Consuegra, Irina de Ardila y Ricardo Ríos. ]
[~socialest-7.jpg~ Francisco Morales, Christopher Zollinger, Darlina de Zollinger e Isabel Morales. ]
[~socialest-8.jpg~ Ricardo Palma, Mabel de Palma y Argelis Herrera. ]
[~socialest-9.jpg~ Ernesto Broce, Isabel Vecchio, Rigoberto Coronado, Sara Montenegro y Stella Ortiz. ]
[~socialest-10.jpg~ Isabel de Zappi y Elvira Terán ]
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Semblanzas: ¿Y los asesinatos de periodistas?
AA: Esa es una de las cosas que mas preocupa a la UNESCO. Es intolerable lo que está pasando; prácticamente todas las semanas tenemos el asesinato de un periodista. Son resabios de esta cultura y por supuesto de la época tan difícil que estamos viviendo de los fundamentalismo, del terrorismo, del narcotráfico vinculados a movimientos parapoliciales, paramilitares, esa vinculación del narcoterrorismo; son escenarios donde denunciar esas cosas es someterse inmediatamente a la amenaza de eso grupos. Entonces, en el momento en que más bien deberíamos preocuparnos por este tipo de hechos, en que se están asesinando hombres y mujeres en América Latina por el hecho de ser periodistas, por ejercer el periodismo, por cumplir con la obligación de informar, nos estamos preocupando por esas viejas leyes del desacato o empeñarnos en sancionar la calumnia y la injuria desde el punto de vista penal, y no del civil; bueno porque el castigo penal es mucho más intimidante, porque lo que nos preocupa no es que existan estas leyes, sino el carácter de amenaza, de intimidación que estas disposiciones legales tienen. Se abusa, como se abusa de otros derechos y hay personas inescrupulosas que evidentemente se valen de determinados derechos para cometer fechorías y el periodismo no escapa a ese mal. Pero no podemos legislar por la excepción, por los casos aislados, porque estaríamos dañando lo normativo, la regla, lo normal en el desempeño del periodismo o en el derecho al libre acceso a la información pública o en el derecho a disentir.
Semblanzas: ¿En tu criterio afecta eso el fortalecimiento de las democracias en la región?
AA: Ahí esta la discusión. Lo que parece insólito es que en el momento en que la democracia en América Latina está amenazada, en que la democracia en América Latina pasa por un estado muy vulnerable, en que comienza a tener serias dificultades de sobrevivencia, ahí movimientos amparados perfectamente en la Constitución que comienzan de nuevo a rescatar, basados en esta cultura autoritaria, estas leyes de desacato, de castigar penalmente la injuria, de prohibir la publicación de determinados documentos, de perseguir las investigaciones, de disminuir la capacidad del periodismo de investigación. Y también hay que ver que pudiera haber medios de comunicación, o pudiera haber periodistas que actúan también con ese periodismo escandaloso o lucrativo al convertirse en esa especie de James Bond del periodismo. Es decir están los dos extremos y yo creo que hay que buscar os términos medios y que la propia sociedad, y el propio ordenamiento jurídico norme de tal manera la situación que ni unos ni otros puedan imponer sus puntos de vista. En estos momentos, cuando hay estas crisis de la democracia, debemos estar preocupados por cómo meter elementos, como añadir elementos y factores que nos hagan tener una mejor democracia y no restarle a la democracia, porque la democracia en estos momentos está sometida a terribles presiones, a terribles amenazas, no para disminuirla sino para desaparecerla, y volver nuevamente al militarismo, a los viejos escenarios que creíamos superados, sobre todo a un renacer el fascismo y del nazi fascismo, al gobierno militar como estilo de gobierno y estilo de vida, lo que es el fundamento del fascismo, y del estado todo poderoso, y la estatización de la vida civil, de la vida ciudadana y del ejercicio político. No podemos estatizar la democracia. En la democracia el Estado tiene que ser un Estado fuerte, eficiente, un Estado que en definitiva ayude, que gerencie el bien común, pero no un Estado que ahogue al ciudadano.
Semblanzas: ¿Y cómo estás viendo a Panamá?
AA: Panamá fue el primer país en América Latina en tener una ley de libre acceso a la información pública. Independientemente de lo que pasó luego, pero fue muy importante, lo que hizo el presidente Martín Torrijos, haber eliminado el decreto que entrababa totalmente la ley de libre acceso a la información publica. Y eso es un gran mérito de su gobierno, como también haber derogado algunas leyes mordaza. Eso es un haber muy importante que la UNESCO lo ha reconocido públicamente. Yo creo que eso es lo que tienen que hacer los presidentes, y eso es un signo de madurez democrática. El punto está en que en este momento lo que tenemos es que abogar para que la cultura del secreto se elimine, para que salga de nuestra vida social, para que podamos tener un libre acceso a la información, para que nos acostumbremos al pluralismo. El problema es que no nos acostumbramos al pluralismo, y por lo tanto no nos acostumbramos al disenso. Nos obsesionamos con el consenso, que es muy importante, pero también la democracia se caracteriza y se debe caracterizar por la existencia de condiciones para el disenso, porque el disenso es una forma de relación de la sociedad, y con el disenso estamos contribuyendo al desarrollo democrático tanto como cuando ponemos las condiciones para el consenso. Entonces consenso y disenso son propios de la democracia. En esto la profesora Ana Maria Miralles, de la Universidad Pontificia de Medellín nos ha ilustrado mucho cuando apunta a fomentar también el disenso en la sociedad. Y no tenerle miedo al disenso.
Semblanzas: ¿Existen áreas específicas donde se afecta el disenso, o donde el estado atenta hoy contra la libertad de expresión?
AA: En el espectro radioeléctrico. El que podamos terminar con ese estado tutelar por ejemplo del espectro radioeléctrico, tiene mucho que ver con el ejercicio de la libertad de expresión. Se produce cuando el estado utiliza su derecho de administrar el espectro radioeléctrico; el Estado no es el propietario es un administrador del espectro radio eléctrico, por lo que tiene que tener un organismo independiente de la administración publica que administre sanamente un bien finito como lo es el espectro radioeléctrico, para que sirva a todos y posibilite que la mayor cantidad de grupos organizados tengan acceso a ese espectro radioeléctrico, y no usarlo como el castigo o la recompensa, que creo que en este momento es uno de los aspectos que esta haciendo mas daño a la democracia en América Latina: te quito una concesión porque no eres de mi simpatía, porque no estoy de acuerdo con tus ideas, porque me estas haciendo daño, porque me estas atacando como gobierno entonces te quito la concesión. Yo creo que el espectro radioeléctrico como bien común, como bien finito, debe estar sometido a una autoridad que lo regule, pero que lo regule con justicia, con inteligencia y apelando siempre al bien común. Entonces son de esas cosas que hay que ir corrigiendo en la democracia, que tenemos que poner en la democracia, si es que queremos salvar la democracia. Si es que definitivamente América Latina quiere apostar por la democracia.

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