Captando el turismo canadiense
Se ubica Canadá en el séptimo lugar a nivel mundial como emisor de turistas con un estimado de 40 millones de visitas internacionales en 2025, precedido solamente por China, Estados Unidos, Alemania, Reino Unido, Francia y Australia. Tomando en consideración su proximidad geográfica en comparación con los otros países emisores líderes, bien vale la pena enfocarnos en este momento en exprimir su potencialidad.
La mayoría de los canadienses viajan tradicionalmente hacia Estados Unidos, siendo México, República Dominicana y Cuba sus otros mercados regionales de mayor interés. El reciente desdeño por parte de la administración entrante en Estados Unidos, sugiriendo la absurda propuesta de convertir a su vecino norteño en el estado #51, tildando a su Primer Ministro de "Gobernador" y amenazando con la introducción de aranceles a sus productos, violando así los lineamientos del Tratado de Libre Comercio de Norteamérica que también incluye a México, mejor conocido por sus siglas en inglés NAFTA, ha caldeado los ánimos y elevado la fiebre del nacionalismo en un país típicamente muy amistoso con una población particularmente disímil al grueso de los estadounidenses.
Aprovechando el gatuperio, bien podrían nuestras autoridades de turismo explotar el momento para maximizar los esfuerzos de publicidad y penetración en ese mercado. Ante todo, diferenciando nuestro atractivo porque a lo opuesto del mercado gringo cuyo mayor señuelo es el Canal de Panamá, el turista canadiense aprecia sobremanera el turismo verde, ecológico y aquel de sol y playa.
Solamente el estado de Florida, como ejemplo, recibe más de 4 millones de visitantes canadienses anuales, en su mayoría en búsqueda de su atractivo principal, el turismo de sol y playa. Impactado, en adición a lo previamente mencionado, sus precios vis-a-vis nuestra oferta han sido afectado severamente por la inflación y costos de operación de su industria sin chimeneas.
Ante todo, habría que escudriñar una estrategia que incluya pasajes aéreos atractivos y una oferta que incluya paquetes todo incluido con enfoque en añadir el francés como idioma de comunicación hacia los 10 millones de sus habitantes, en su mayoría centrados en la provincia de Quebec y particularmente la ciudad de Montreal.
La presencia de nuestro empeño turístico en Canadá debe ser permanente, con frecuentes roadshows hacia toda la geografía de sus diez provincias, en idiomas inglés y francés.
Recuerdo de mis años de preparatoria en Boston, nuestras frecuentes visitas a Toronto, Montreal y la capital canadiense, Ottawa, sirviendo como cereza al pastel, un viaje en tren de costa a costa, que me permitió olfatear la verdadera personalidad canadiense, encontrando en sus habitantes una población harto afable, ansiosa en curiosear nuestra oferta y totalmente diferente a la gringa, quien nos olfateaba como su patio trasero, apéndice de México y cuasi colonia. ¡Aprovechemos el gazapo, nuestro momento de descollar es ahora y ya!