Emprendimiento
Los panameños necesitamos creer que 'sí se puede'
...a pesar de ser un país muy pequeño, hemos logrado grandes cosas; cosas que incluso grandes potencias no han sido capaces de hacer. Pero entonces, ¿qué nos hace falta para que el espíritu visionario y emprendedor que distingue a estas empresas llegue a las bases de nuestra sociedad?... un largo proceso de maduración.
- Ricardo Ríos
- /
- [email protected]
- /
- - Publicado: 10/1/2019 - 12:00 am
Hace un par de días, recibí de un buen amigo italiano, que hace poco fue trasladado fuera de Panamá, un artículo de CNN en el que se hace el reconocimiento a la principal aerolínea panameña, como la de mayor índice de puntualidad a nivel mundial (89.79%), tomando como base el registro de más de 58 millones de viajes en el año, de todas las aerolíneas que operan en nuestro planeta.
Lógicamente, esto me generó una sensación de orgullo como panameño; pero esto no fue lo que más llamó mi atención, sino el hecho de que la nota de mi amigo terminaba diciendo: " Siempre he creído que en Panamá hay dos cosas que funcionan como un reloj, Copa y ACP. Sí se puede". Inmediatamente tuve dos pensamientos.
1- Que este amigo italiano que vivió en nuestro país por más de 10 años y que en ocasiones podía parecer muy crítico de nuestras dinámicas sociales y culturales se había llevado consigo un pedacito de Panamá, y al decir "Sí se puede", manifestaba de alguna manera su arraigo emocional y su rabia por lo que él entiende que, como panameños podemos lograr, pero que no hemos sabido integrar en nuestra idiosincrasia.
VEA TAMBIÉN: Pacto mundial sobre migración
2- Que, a pesar de ser un país muy pequeño, hemos logrado grandes cosas; cosas que incluso grandes potencias no han sido capaces de hacer.
Pero entonces, ¿qué nos hace falta para que el espíritu visionario y emprendedor que distingue a estas empresas llegue a las bases de nuestra sociedad?
Creo que muchas cosas y un largo proceso de maduración. Me voy a atrever a comentar solo un par que considero pilares básicos para esa transformación.
1- Elevar el nivel educativo en nuestro país.
Hemos sido muy ineficientes preparando a los profesionales y técnicos del futuro.
Mientras el nivel educativo de la mediana de nuestra población no incremente, será muy difícil desarrollar nuevos líderes que lideren organizaciones con estándares más altos.
2- Empoderarnos y comprender que somos responsables de nuestro futuro, sin culpar a nadie más.
Que está en nuestras manos tomar las decisiones adecuadas para generar bienestar personal y social.
Confiar, hacer un plan y ejecutarlo.
3- Participar activamente en la elección de nuestros gobernantes y exigir rendimiento de cuentas. Están a nuestro servicio y deben administrar responsablemente la cosa pública. Incluso, me atrevería a asegurar que han sido los responsables de que los dos puntos anteriores sigan siendo un obstáculo para nuestro desarrollo.
Al final, debemos reconocer que hemos sido y somos una sociedad muy paternalista; estamos siempre en espera de que alguien venga a resolvernos los problemas.
VEA TAMBIÉN: Los sectores dominantes y el fantasma del Gafi
Esa es la diferencia con las 2 empresas que antes mencioné, y muchas otras que operan bajo parámetros superiores, y que muestran el potencial que tenemos como país, mas no la realidad de nuestra mediana.
En estas organizaciones, sus líderes comprendieron que solo ellos eran responsables de generar una operación de clase mundial, se empoderaron, lo convirtieron en una cultura y hoy vemos los resultados.
Al iniciar un nuevo año, debemos hacernos el firme propósito de integrar una mejor preparación y una actitud ganadora en nuestras vidas, en nuestras familias y en nuestras empresas.
Porque como bien dice mi cascarrabias amigo italiano, "Sí se puede".
Consultor de negocios, especialista en manejo de marcas, incubador de proyectos, viajero del mundo.
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.