Presentan proyecto de ley para proteger la Semana Santa Viviente de Pesé
La alcaldesa de Pesé, Yesenia Alfonso, expresó su satisfacción por la aceptación inicial del proyecto y agradeció el apoyo brindado por las autoridades.
La Semana Santa Viviente de Pesé tiene sus raíces en 1954, cuando el sacerdote José Luis Angulo, párroco de la comunidad, impulsó a los fieles a escenificar los pasajes de la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo. Foto. Thays Domínguez
La histórica tradición de la Semana Santa Viviente de Pesé, considerada una de las expresiones más significativas del turismo religioso en Panamá, dio un paso importante hacia su reconocimiento y protección legal.
Esto luego que autoridades locales, representantes de la comunidad y líderes religiosos participaron en la Asamblea Nacional en la presentación del Proyecto de Ley 329, que busca declarar y respaldar oficialmente esta celebración como patrimonio cultural y religioso.
La iniciativa fue remitida a la Comisión de Educación, Cultura y otros asuntos para su discusión y posterior aprobación. .
La alcaldesa de Pesé, Yesenia Alfonso, expresó su satisfacción por la aceptación inicial del proyecto y agradeció el apoyo brindado por autoridades, organizadores del drama, líderes religiosos y la comunidad.
“Confiamos en que este proyecto será aprobado para salvaguardar una tradición que pertenece a todos los moradores de Pesé y al país”, manifestó Alfonso.
La Semana Santa Viviente de Pesé tiene sus raíces en 1954, cuando el sacerdote José Luis Angulo, párroco de la comunidad, impulsó a los fieles a escenificar los pasajes de la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo.
Desde entonces, se ha convertido en una manifestación religiosa y cultural que atrae a miles de visitantes nacionales e internacionales cada año, en una producción escénica y teatral qué es transmitida en vivo a través de la televisión nacional.
De aprobarse la ley, se garantizará el respaldo necesario para la preservación, promoción y organización de esta actividad, fortaleciendo así su impacto cultural, espiritual y turístico en la región de Azuero, indicaron los moradores.