Vendedores del mercado de Santiago enfrentan alza del ganado y dura competencia
“Los costos están subiendo y eso nos afecta bastante, porque tenemos que mantener la calidad y seguir ofreciendo carne fresca, dijo Edwin Hernández.
Edwin Hernández, matarife del mercado, lo dijo: "el alza está espantando las ganancias y dejando menos margen para trabajar tranquilos". Foto. Melquíades Vásquez
En el mercado público de Santiago, la gente que vive de la carne está pasando días difíciles.
Vendedores y matarifes advierten que el precio del ganado y los cerdos en pie se fue para arriba, y eso los tiene contra la pared, tratando de mantener el negocio vivo mientras la competencia crece por todos lados.
Edwin Hernández, matarife del mercado, lo dijo: "el alza está espantando las ganancias y dejando menos margen para trabajar tranquilos".
“Los costos están subiendo y eso nos afecta bastante, porque tenemos que mantener la calidad y seguir ofreciendo carne fresca, como la gente la busca”, explicó.
Alfonso Sánchez, otro de los que madruga entre cuchillos y ganchos, explicó que, a pesar de todo, el precio para el consumidor sigue accesible.
Afirma que la pelea es desigual cuando toca competir con los grandes supermercados.
“Ellos manejan volúmenes enormes, uno acá trabaja al día, a puro pulmón. Aun así, la gente sigue viniendo porque aquí la carne es fresca, de calidad y con garantía”, dijo.
El mercado público de Santiago sigue siendo el punto de confianza para las familias veragüenses que quieren carne recién sacrificada, con ese toque artesanal que no se consigue en ningún pasillo congelado.
Y entre tanta preocupación, también llegó una noticia buena para las fiestas: ya apareció el guandú nuevo.
La productora Grisel Concepción, de El Pedregoso (Santa Fe), contó que el tradicional grano ya está en venta.
“La bolsita está a $3.00, es guandú fresco, de calidad y directo de nuestra mano a la mesa del consumidor”, dijo, recordando que la demanda se dispara cuando se acercan Navidad y Año Nuevo.
Los comerciantes piden que las autoridades revisen lo que está empujando el alza del ganado y del cerdo en pie, porque si esto sigue así, mantener carne fresca en la mesa del pueblo se va a poner cada vez más difícil.