Informe de Humbert, pretensiones políticas
La supuesta auditoría por el contralor Federico Humbert solo abarca cinco obras de la pasada administración del expresidente Ricardo Martinelli.
Como pretensiones políticas son catalogadas las auditorías del contralor Federico Humbert, en las que señala que hubo unos $318 millones de sobrecostos en cinco obras de la administración del presidente Ricardo Martinelli con la empresa brasileña Odebrecht.
Sectores políticos plantean que las auditorías debieron incluir todas las obras desde la administración gubernamental del perredista Martín Torrijos, y no solo la gestión de Martinelli.
Recordaron que Humbert apoyó en la pasada campaña presidencial a Varela y también fue embajador de Panamá en Estados Unidos en la administración de Martín Torrijos.
En ese sentido, el analista político José Blandón indicó que el informe se centró solo en el gobierno ejecutado por el ahora partido opositor de Cambio Democrático (CD), y se omitió las otras administraciones como la del expresidente Martín Torrijos y la actual del mandatario Juan Carlos Varela.
Blandón tachó la divulgación del contralor como la irresponsabilidad más grande que se ha cometido en la administración pública panameña. Agregó que el informe que presentó Humbert no es una auditoría, y menos una auditoría forense, sino un documento con claras 'pretensiones políticas'.
"No es nuevo para el país que el contralor aspira a ser candidato presidencial, el cual tiene todo el derecho, pero que el derecho que no tiene es de utilizar su puesto de contralor para impulsar su candidatura", argumentó.
En tanto, para el partido Cambio Democrático, a nadie engañan las "auditorías chimbas" de Humbert, ya que no son nada nuevas, porque desde su llegada a la Contraloría han sido el único sustento de los procesos políticos que empezaron en el Consejo de Seguridad bajo la tuleta de Porcell.
Sin embargo, alegan que para nada han servido estas evidencias fabricadas y amañadas porque en el desarrollo de los procesos, con el respaldo del equipo de defensa, han sido derrumbadas.
"No es un secreto que Humbert aspira a ser el candidato oficialista, por ello, ha colaborado entusiastamente en la ejecución de una estrategia que busca desacreditar la gestión presidencial que encabezó el exmandatario Martinelli", sostuvieron.
Al igual que Blandón y la dirigencia de CD, el abogado Ernesto Cedeño asegura que lo normal era que se auditara todas las obras desde que llegó la empresa brasileña a Panamá, durante el gobierno de Martín Torrijos, para que se fortalezca de objetividad y transparencia.
"Esos áuditos no son una plena prueba", dijo.
En sus planteamientos, Blandón destaca que es un mecanismo que quiere usar el contralor para distanciarse y diferenciarse de la procuradora general de la nación, Kenia Porcell, dejando un problema en manos de esta persona con algo que no es una auditoría.
Para Blandón, es sorprendente ver que por primera vez en la historia para hacer auditorías se dice cuál es el precio razonable, ya que el precio de una obra está determinada por lo que se establece en los pliegos.
Explicó que no hay ningún análisis del contrato, de los costos unitarios para desarrollar el contrato, ningún análisis de los hallazgos de geología que pudieron haber determinado o no cosas diferentes y ningún análisis de las adendas que el dueño del proyecto pidiera a la empresa que está haciendo la obra correspondiente.
"No hizo ninguna auditoría. No existe tal cosa como un costo razonable, solo se puede determinar su valor cuando es terminada", agregó.
Este informe, según Blandón, está preparado para que Humbert tome distancia de una situación que con mucho esfuerzo viene preparando y estudiando el Ministerio Público (MP), y el contralor cree que con esta posición él logra pegarle al partido con mayor opción electoral presidencial en estos momentos, que es Cambio Democrático.
"Si las elecciones fueran hoy, ganaría cualquier candidato que sea de CD, esa es una realidad política, aunque le guste o no a la sociedad civil o a los antimartinelistas, eso es un hecho político", sentenció el analista político, quien justificó que por eso el Tribunal Electoral (TE) no permite que otras encuestadoras salgan a revelar este panorama.