El arte de las velas
- Por Yureth Paredes
Todo esto es muy fácil de realizar, sólo necesita los siguientes materiales y manos a la obra.
Velas de diferentes clases, tamaños y colores.
Pistola eléctrica caliente para pegar.
Goma de manualidades.
Papel de regalo.
Cintas.
Flores (secas, plásticas, de seda, etc.).
Candeleros o recipientes de varios tipos (acrílicos, de aluminio, de cristal...)
Figuritas planas de cera para decorar (vienen adheridas a un papel y se fijan presionándolas cuidadosamente sobre la superficie a decorar).
Una vela de color azul pálido o malva, adornada con hilos de perlas y colgantes metálicos (de los que se usan en collares y pulseras). Para realzarla aun más, se envuelve la base con encaje fruncido.
En un candelero dorado, se puso una vela larga y fina de superficie acanalada. Esta se adornó con un hilo de perlas, fijado con la pistola eléctrica. Al final, se aseguró un lazo (también de perlas) en la base.
Preciosa se ve una vela pequeña y redonda si se adorna con angelitos dorados de cera y se deja flotar en un vaso de agua. Para mantenerla derecha, se le fija un centavo en la base con cinta adhesiva.
Aquí se ve un florero en forma de copa que se voltea al revés, y en cuyo tallo se ata un galón plateado. En el fondo (que quedó hacia arriba) se pone una vela redonda rosada, rociada con pintura plateada de brillo.
A esta lata de conserva se le quitó la tapa. Luego se lavó y se lijó el borde para alisarlo bien. ¿El diseño? Un pájaro con corazón y guirnalda, grabado en su superficie con perforaciones. El adorno se completa añadiéndole a la lata una cinta decorativa, y poniéndole dentro una vela en su candelero.
Esta vela de color melocotón se adornó con hojitas de cera doradas. Luego se puso brillo dorado en el borde superior, valiéndose de la pistola eléctrica. La vela se dejó flotar en una copa de vino llena de agua.
Para adornar a lo fácil una vela blanca, basta presionar sobre ella pensamientos de cera. Una cinta de color vino y un pensamiento de seda completan el conjunto. La base es un candelero dorado.
Para un efecto "natural", sirven las velas de todas clases (redondas y blancas, por ejemplo, gruesas y cortas de color crema, gruesas y altas de color blanco o largas y finas de forma cónica y color verde claro). Sólo hay que adornarlas con flores según la técnica del decoupage. Para terminar, pueden envolverse con una banda de cartulina corrugada atada con rafia o soga. ¡Fabulosas en una vasija de barro!
El estilo country ¡hasta en las velas! Aquí se adornó una pequeña de forma cónica y color morado con pegamento de colores, aplicado con la pistola eléctrica. Luego se colocó la vela en un tiesto de cerámicas de igual color lleno de flores secas y atado con una cinta decorativa.
Una vela roja como esta resulta perfecta para celebrar la Navidad, sobre todo si se decora con lentejuelas doradas, que se fijan formando una campana.
Un helecho y algunos pétalos rosados se usaron para decorar una vela blanca y fina de forma crónica, que se colocó en un cesto de alambre cubierto de musgo.
Este arreglo es ¡facilísimo de hacer! Basta extender goma de manualidades en una vela blanca y gruesa, y hacerla rodar luego sobre un popurrí de flores y hojas secas triturado. Así se añaden colores y textura a la vela.
¡Con un aire de otra época! Este candelabro alto se ha coronado con una vela ancha de color melocotón, previamente decorada con hojas de helecho.
Una vela ancha de color melocotón es el fondo perfecto para dar aun más suavidad a unos pensamientos secos amarillos.
Helechos y pensamientos morados de papel le dan vida a una vela blanca gruesa, que se completa con una cinta azul.
Para realzar el delicado diseño de flores de esta vela blanca y fina de forma cónica, nada mejor que un candelero de cristal nevado rematado por una cinta de color morado.
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